Hasta el cierre de esta nota, más de una hora después del reconocimiento de Yamandú Orsi como presidente electo de Uruguay, Javier Milei no había saludado a su flamante colega rioplatense, que llevará al progresismo de regreso al gobierno orienal.
Dejó el trámite protocolar a cargo de la Cancillería, que saludó al ganador del ballotage en nombre de "la República Argentina", no del Gobierno.
Hasta el cierre de esta nota, más de una hora después del reconocimiento de Yamandú Orsi como presidente electo de Uruguay, Javier Milei no había saludado a su flamante colega rioplatense, que llevará al progresismo de regreso al gobierno orienal.
El presidente argentino dejó el trámite protocolar en manos de la Cancillería, que emitió un comunicado en el que felicita primero al pueblo uruguayo y luego al ganador del ballotage, además de que no lo hace en nombre del Gobierno sino de "la República Argentina".
"La República Argentina felicita al pueblo uruguayo por su ejemplar jornada cívica y saluda al presidente electo Yamandú Orsi por su victoria", señaló el Palacio San Martín en un tuit que Milei replicó. "Ratificamos nuestro compromiso de trabajar junto a Uruguay para fortalecer la agenda compartida y el bienestar de ambos países", completó.
El resultado de las elecciones presidenciales uruguayas saca del mapa a uno de los gobiernos más afines al que encabeza Milei y suma una administración progresista a un bloque poderoso que integran el del brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, la mexicana Claudia Scheinbaum, el chileno Gabriel Boric y el colombiano Gustavo Petro.
Como planteó Marcelo Falak en Letra P, el presidente argentino queda más solo en el mapa regional, pero, a la vez, se consagra como la referencia principal de la derecha en el cono sur para consolidar su alianza con su par electo de Estados Unidos, Donald Trump.