Habrá una megacumbre el 10 de marzo en La Plata con 500 dirigentes de ambos exsocios de JxC. Punto cero y puerta abierta para otros espacios.
Cristian Ritondo (PRO) y Maximiliano Abad (UCR).
No lo describen como un regreso ni como una reconciliación: hablan de un nuevo punto de partida. El PRO y la UCR volverán a juntarse con el fin de mostrar su poder territorial en Buenos Aires, como una alternativa a la gestión de Axel Kicillof, pero con distancia respecto del gobierno de Javier Milei.
La megacumbre será en La Plata el 10 de marzo y contará con la presencia de casi 500 dirigentes, entre tropa legisladora nacional y provincial, además de referentes de intendencias de ambos partidos, que reeditarán la coalición con la que fueron socios en las últimas cinco elecciones, a pesar del distanciamiento en la relación que produjo la dura derrota de 2023.
La consigna del encuentro -organizado por el exintendente de la capital bonaerense Julio Garro - girará en torno a las urgencias que atraviesa Buenos Aires y tendrá tres ejes: infraestructura, salud y seguridad. Las charlas que se darán en modo conversatorio estarán a cargo de intendentes e intendentas, legisladores y legisladoras y especialistas en cada materia.
Según pudo saber este medio, asistirá casi la totalidad del PRO conducido por Cristian Ritondo y la UCR liderada por Maximiliano Abad. No así el radicalismo disidente, que nuclea a la dirigencia de Facundo Manes y Martín Lousteau. El mitin será en el complejo de la cadena Howard Johnson que se encuentra a las afueras de La Plata.
El PRO no encontró eco en el pedido de convergencia que viene pidiéndole a La Libertad Avanza para las elecciones legislativas, y decidió mostrar la fortaleza territorial y su estructura electoral con un viejo conocido, del que se desprendió durante el último año para lanzarse a una aventura libertaria que no resultó como esperaba.
Con el diálogo cortado entre Javier Milei y Mauricio Macri, el partido que en la provincia conduce Ritondo decidió convocar a toda su tropa para dar una señal de fuerza. Según pudo saber este medio estarán casi todas sus principales figuras -la duda pasa por Guillermo Montenegro (intendente de General Pueyrredón), que viene dando señales de acercamiento a LLA, y probablemente no esté su par Ramón Lanús (San Isidro), cercano a Patricia Bullrich. El resto, todos y todas.
Habrá nombres fuertes e históricos del partido del ingeniero como el de Néstor Grindetti, quien renunció al gobierno porteño de Jorge Macri y quienes responden a la estructura del jefe de Gobierno, como Soledad Martínez y Pablo Petrecca. También afirmaron que a La Plata llegará Diego Santilli, junto a la tropa legislativa nacional, y los bloques legislativos de la provincia.
“Es un nuevo camino, el punto cero”, le dijo a Letra P una de las figuras importantes que estará presente en la cumbre. El espacio político que representa entiende que “la provincia tiene urgencia en que aparezca algo nuevo”, y que eso debe ser frente al kirchnerismo que encarnan Kicillof y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, pero tomando distancia de la administración libertaria.
El radicalismo hace meses que viene sosteniendo que los límites están en las puertas de la Casa Rosada y de la gobernación, y que con todo el resto del arco político bonaerense podría sumar fuerzas para avanzar en un frente electoral que se convierta en una alternativa de centro para la provincia.
Estarán en La Plata intendentes e intendentas que responden al comité provincial de la UCR, como también integrantes del Congreso, la Legislatura, Consejos Deliberantes y dirigencia de todos los distritos. En ese camino podrían aparecer en los próximos meses espacios del peronismo no K y sectores de centro que también busquen confluir en una coalición.
El inicio de esta nueva etapa de lo que alguna vez fue Cambiemos y luego fue rebautizado como Juntos por el Cambio implica la formalización de un acuerdo que viene sonando hace un par de semanas entre dos fuerzas que se conocen bien y que comparten cierta planificación legislativa en la provincia. No obstante, desde la organización hablan de un punto cero porque saben que en el camino habrá tensiones y una búsqueda de acuerdos que no se cerrará en estos dos partidos.
En función de ello es que hay una invitación abierta a la Coalición Cívica, que por el momento está resolviendo cuestiones hacia adentro del espacio en CABA, y a todos los dirigentes del PRO y la UCR, aún a aquellos que estaban decididos a pegar el salto a LLA. Los organizadores de la cumbre sostienen que estar marcará un compromiso hacia adelante y que no estar significará toda una decisión en virtud de lo que pueda acontecer con el nuevo frente.
Ese argumento se sostiene en que en este acuerdo participan las máximas referencias políticas de ambos espacios (Abad y Ritondo), pero que en el caso del PRO asciende aún más por contar con la venia de Macri. También se trata del regreso de Grindetti al armado bonaerense. En los dos partidos parece encontrarse un optimismo que hacía tiempo no aparecía porque, explican, “ahora hay algo con sustancia, algo concreto”.