Claudio Vidal impulsa inversiones en puertos provinciales. El empresariado que ya explota los recursos del mar patagónico se opone. La conexión bonaerense.
El gobernador de Santa Cruz con empresarios pesqueros chinos
X Claudio VidalEl anuncio de una inversión de u$s200 millones de una megaempresa china para desarrollar infraestructura en puertos de Santa Cruz agitó las aguas del mar argentino. La decisión de Claudio Vidal provocó el rechazo del sector que opera en la región y que le atribuye a la nueva compañía representar a la “flota ilegal” que pesca en la milla 201.
La explotación de la riqueza ictícola nacional está dominada por capitales chinos y españoles. Ahora se espera el desembarco de otras empresas asiáticas, ibéricas, rusas y taiwanesas, que ya operan afuera de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de jurisdicción argentina.
Consultados por Letra P, quienes se oponen a la decisión del gobernador santacruceño consideran que es un acuerdo que "debe comandar la Cancillería". En tanto, Vidal ya le advirtió al empresariado pesquero que "no va a quedarse a esperar al gobierno nacional".
El conflicto de intereses se da en un contexto de dólar barato por las políticas de Javier Milei y Toto Caputo. Esto se combina con la baja del precio internacional del producto, el alza de los costos internos en 2024. la carga impositiva y las retenciones a las exportaciones que dejaron sin rentabilidad a la industria pesquera nacional.
“Este proyecto es fundamental para fortalecer la cadena de valor de nuestros recursos marítimos, generar empleo y modernizar los puertos provinciales”, detalló Vidal en un comunicado oficial al anunciar que la empresa Hangdong, la segunda pesquera china, se comprometió a invertir en puertos santacruceños.
El acuerdo se cerró tras el viaje que el gobernador hizo a China y después de al menos dos visitas de funcionarios del gigante asiático al país para recorrer los puertos de Santa Cruz.
La idea que empuja el mandatario es que los puertos de su provincia puedan brindar servicios de abastecimiento, reparación, catering e incluso obligarlos a que procesen allí parte de la pesca de la milla 201.
Los expertos consultados por este medio desestiman que se trate de "pesca ilegal" porque son peces capturados en aguas internacionales y los barcos de la empresa no suelen ingresar al caladero argentino.
"Recorrimos nuestros puertos y plantas productivas y desarrollamos un plan de inversiones superior a los u$s200 millones que serán realizadas por la empresa China Hong Dong y la Argentina Hexarmonia Capital S.A.", puntualizó Vidal.
Actualmente las flotas de aguas internacionales que pescan al límite de la jurisdicción nacional se abastecen en ultramar o utilizan los servicios de los puertos de Montevideo en Uruguay, Punta Arenas en Chile o en las Islas Malvinas.
"Argentina la ve pasar, no participa de este negocio, que bien aprovechado puede ser más importante que la recaudación del caladero", dijo a Letra P un experto del sector pesquero que ocupó cargos en otras administraciones provinciales.
Hexarmonia, el socio nacional de las pesqueras chinas, genera dudas en el mercado. Es una empresa pyme bonaerense que se formó con un capital de $100.000. Su titular es Jonatan Tor, quien en 2022 se presentó como director de Hidrocuyo en una reunión con funcionarios salteños y la empresa china Energy China.
Tor figura, además, como socio de los hermanos Patricio O'Reilly y Alejandro O’Reilly en otra pyme. Se trata de la empresa APOR.SA, en la que también es socio Longfu Wu, representante del Consejo General Empresario Argentino Chino.
Hidrocuyo es la firma socia de la Unión Transitoria de Empresas (UTE) que también integra la firma china Gezhouba, a cargo de la construcción de las dos represas de Santa Cruz, ahora paralizadas.
Al mismo tiempo, Tor conformó la empresa Grupo MJP S.R.L., una constructora e inmobiliaria con un capital de 400.000 pesos.
“La inversión de esta empresa pesquera del Estado chino es efectivamente muy controvertida y peligrosa. En Argentina ya hay muchas inversiones de capitales chinos, pero no están vinculadas con flotas que operan en la milla 201”, le dijo a Letra P un representante del sector pesquero que opera en el litoral marítimo nacional.
“Que una empresa de este tipo quiera invertir en frigoríficos u otras instalaciones para dar soporte a su flota de la milla 201 sería muy grave para la flota potera nacional, que debe competir en los mismos mercados con estas empresas que tienen subsidios del Estado chino y que operan con mano de obra cuasi esclava”, expresó la fuente empresaria consultada.
Expertos medioambientales alertaron también sobre el riesgo de colapso de las poblaciones de calamar ante la posibilidad de sobrepesca.
La pesquería nacional está conformada por un 50% de capitales chinos, otro 35% de empresas españolas y los restantes son inversores nacionales.
El empresariado local defiende el recurso del caladero nacional y no quiere que las denominadas “flotas de aguas distantes” encuentren apoyo en las costas argentinas.
Lo hace por que sabe que esas flotas son financiadas por estados nacionales que les subsidian el combustible, además de que no están obligadas a cumplir leyes laborales y otras prerrogativas que las hacen más eficientes y competitivas.
Según le explicó a Letra P un experto del sector, afuera de la milla 201 pescan unos 320 barcos que se aprovechan de los cardúmenes que no saben de divisiones jurisdiccionales, el límite del mar territorial y la ZEE .
Los buques poteros son los que pescan calamar y son más identificables porque trabajan con luces que iluminan el mar, pero también hay buques arrastreros o palangreros, dedicados a la merluza negra. Esta especie es la más requerida por su valor económico: cotiza u$s25.000 por tonelada, contra los u$s5.000 de la merluza común.