EL MESSI DE LA TIMBA

Toto Caputo lo hace otra vez, como en 2018: la bicicleta financiera volvió con todo

Con Mauricio Macri a la cabeza, el Carry Trade Festival 2018 terminó mal. Intervencionismo y desinflación forzada. ¿Se viene un huracán devaluatorio?

Toto Caputo, el Messi de la timba, lo está haciendo de nuevo: el festival del carry trade, que alentó en 2018 y así terminó la presidencia de Mauricio Macri, puso a andar a toda marcha, una vez más, la bicicleta financiera. En esta nota, cómo funciona y los riesgos que implica esta insana tradición nacional.

Maldita inflación, bendida desinflación

El INDEC dará a conocer este jueves la inflación de septiembre, que el oficialismo espera menor al 4%, pero que, a juzgar por el precedente deI índice porteño, no alcanzaría a despejar la sensación de altiplano.

Para forzar lo que considera su principal activo, la desinflación, el Gobierno atrasa los tipos de cambio y hace día a día más acuciante la pregunta por lo que ocurrirá cuando se "sinceren" sus cotizaciones, esto es la magnitud del rebrote de la inflación, de la recesión y de la caída de los salarios que eso provocaría, con sus correspondientes costos políticos, claro. De hecho, el gigante BlackRock acaba de advertir a sus clientes sobre ese peligro en ciernes.

Ese atraso cambiario es una pieza clave del juego que mejor juega y que más le gusta al ministro de Economía: el recurso permanente a la bicicleta financiera, fuente de la lucrativa felicidad de unos pocos y garantía de empobrecimiento para la sociedad.

Sí, Toto Caputo lo hizo de nuevo

Los tipos de cambio paralelos siguen en caída libre y el riesgo país perforó a la baja los 1.200 puntos básicos, novedades celebradas en el Palacio de Hacienda.

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Caen los tipos de cambio paralelos y celebra Toto Caputo. Fuente: Rava Busátil.

Caen los tipos de cambio paralelos y celebra Toto Caputo. Fuente: Rava Busátil.

El apetito por los activos en pesos tiene varias causas varias causas. Una, la confianza en que el Gobierno mantendrá su esquema de gobernabilidad, garantía de superávit fiscal y, por lo tanto, de los recursos para pagarles a los acreedores. Dos, el compromiso con la desinflación a como dé lugar. Tres, la baja de las tasas en Estados Unidos, lo que incrementa el apetito de los fondos de inversión por el más lucrativo riesgo emergente. Cuatro y no menos importante, las colocaciones en moneda nacional realizadas con los dólares del blanqueo, ya unos 13.000 millones de dólares.

Toto Caputo lo hizo de nuevo: volvió la vieja bicicleta financiera.

En la jerga, eso se conoce como carry trade, el cambio de dólares por pesos, la consiguiente obtención de altos rendimientos en moneda nacional contra un tipo de cambio estable y su conversión final, otra vez, en billetes verdes para realizar las ganancias.

Ese ciclo, cuya última gran expresión tuvo lugar con el propio Caputo en el gobierno de Mauricio Macri, en 2018, tarde o temprano culmina en una nueva de vuelta de ruinoso empobrecimiento nacional.

Toto Caputo, el incorregible

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Mauricio Macri y Toto Caputo, animadores del Carry Trade Festival 2018.

Mauricio Macri y Toto Caputo, animadores del Carry Trade Festival 2018.

Consultado por este medio sobre las peculiaridades del carry trade 2.0 del ministro de Economía, el analista financiero Christian Buteler explicó que "el que más se mueve hoy es el que hacen empresas exportadoras, que van a los bancos, a los que les sobran los dólares (por el blanqueo de activos) y sacan un crédito a una tasa de entre el 6 y el 7% anual, dependiendo de la entidad. Cabe destacar que los créditos subieron en alrededor de 1.000 millones de dólares en los últimos 45 días".

"Como son firmas exportadoras, cambian el 80% de esos dólares por pesos en el mercado oficial, lo que le da al Banco Central la posibilidad de comprar esas divisas y desmentir la previsión de que en estos meses no iba a tener un saldo positivo en el mercado. El 20% restante, en función de lo que se llama blend, lo negocian en el mercado paralelo", continuó.

Obviamente, esa es una chance que sólo tienen las empresas exportadoras: el resto de la población no puede acceder al crédito en dólares.

El paso siguiente, indica Buteler, es que, mientras "algunas de esas empresas usan los préstamos en dólares para financiar su capital de trabajo, otras los vuelcan directamente al circuito financiero, comprando, por ejemplo, lecaps", un instrumento de renta fija en pesos de corto plazo, "a una tasa que ronda el 50% anual".

De esa manera, el costo total de la operación es el del crédito bancario más el 2% que sube el dólar todos los meses en base a la tablita –crawling peg– definida por el Banco Central.

En términos anuales, el crawling peg "implica una tasa del 27%, lo que, sumado a lo que cobra el banco, eleva el costo de la operatoria al 34 o el 35%. Recordemos que el rendimiento en pesos es del 50%… Eso es ganar plata gratis", cerró Buteler.

¿Cuál es el riesgo? Simplemente que el Gobierno no cumpla con el esquema de minidevaluaciones del 2% mensual y las acelere, posibilidad que la fuente consultada y el mercado en general desestiman.

Más arriba se señaló que el Central suma reservas mediante la compra de los dólares prestados por los bancos a los exportadores reciclados en especuladores. Eso, perdón por la mala noticia, entra hoy y se irá mañana, cuando la rueda de la felicidad toque a su fin.

Los otros caminos de la bicicleta de Toto Caputo

Hay en curso, con todo, otras formas de carry trade, algo más arriesgadas y, por ende, más jugosas, realizadas por inversores que, al no ser exportadores, se manejan enteramente en el mercado cambiario paralelo. Ponen sus dólares allí, los pasan a pesos, se paran en tasa y, al final, vuelven al billete verde. Hasta la próxima vez.

Esa rueda les dejaron a sus responsables ganancias en dólares del 28%, lo que se consiguió en (los últimos) tres meses gracias a una caída de las brechas del 25%, según calculó Aurum Valores. Sí: 28% en dólares en apenas 90 días.

El actual ciclo de carry trade es el más extenso de todos los recientes. Caputo lo hizo.

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Claro que la gran diferencia que se da entre esta forma de carry trade y la descripta por Buteler es la falta de garantías respecto de la cotización de los dólares paralelos al momento de la salida. Calma: Caputo se encarga de ese inconveniente.

Hay que prestar atención al aporte que le hace la reducción de la brecha entre los dólares paralelos y el oficial a la nueva bicicleta –la reducción del 25% mencionada por Aurum– y recordar que es producto tanto del blend vigente para la liquidación en el mercado "libre" del 20% de las exportaciones como de la venta de esa proporción de los dólares obtenidos de los bancos para especular. Eso incrementa la oferta y plancha la cotización, truco que muestra el lado B de la euforia oficial.

En lo que hace al carry trade de los inversores comunes –los que no pueden salir del circuito al dólar oficial–, eso se refuerza por la intervención de Caputo y su exsocio en la consultora Anker, el titular del Central, Santiago Bausili, para bajar los paralelos vendiendo allí todas divisas que ingresan por ventas externas.

Toto Caputo Bausili
Toto Caputo y Santiago Bausili, socios de los dos lados del mostrador.

Toto Caputo y Santiago Bausili, socios de los dos lados del mostrador.

Ellos dicen querer retirar pesos del mercado, pero buscan aplanar la cotización para forzar una desinflación de patas cortas.

La consecuencia, desde ya, es la habilitación de más canales especulativos.

Así será hasta que la rueda deje de girar, el pase al dólar y la fuga se hagan intensos y la sociedad se quede con las consecuencias de una devaluación.

Ese es el ciclo repetido de la ruina nacional. Todavía falta para ver su final, pero, cuando el momento llegue, habrá que agarrarse fuerte.

Toto Caputo.
Toto Caputo y Santiago Bausili

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