El ministro esperaba que la inflación tuviera este número adelante. Igual cantidad de medidas en análisis. La bicicleta financiera, en la línea de largada.
Toto Caputo, modelo 2025
NALa confirmación del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) de que el dato de inflación de diciembre tuvo un dos adelante; hizo que el ministro de Economía, Toto Caputo, analice aún más un número igual de medidas que tiene previstas tomar para consolidar el pulso del programa económico en 2025.
El presidente Javier Milei había avisado que, si el dato del Índice de Precios al Consumidor (IPC) es del 2,5%, el Banco Central bajaría el ritmo de microdevaluaciones diarias en el tipo de cambio oficial del 2% al 1% mensual.
La segunda medida la anticipa el mercado: con un crawling peg más bajo, el camino “lógico” sería recortar una vez más la tasa de interés, actualmente del 32% anual y 2,6% mensual. Para 2025, uno de los objetivos de la administración libertaria será que la actividad económica se recupere a través del crédito.
El equipo económico de Caputo entiende que el control del ritmo del dólar dejó de ser un ancla inflacionaria para pasar a ser inercia. Es decir que según cómo el Gobierno calibre el avance de la divisa estadounidense, se moverán los precios de la economía.
A la vez, un dólar que avanza más lento podría contribuir a una mayor apreciación del peso y, además, impulsaría a una nueva camada de operadores financieros a hacer carry trade.
Un tipo de cambio que se mueve más lento propicia una bicicleta financiera que, pese a bajar la tasa, la combinación de variables le conviene para hacer tasa en pesos y volver a comprar más divisas.
Así lo explicó el analista financiero Christian Buteler: “El carry trade consiste en tomar créditos en dólares, liquidarlos en pesos en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) y colocar esos pesos en instrumentos con mayores rendimientos en moneda local”.
“Bajo un escenario en el que el costo del crédito en dólares es del 6% anual y el crawling peg se ubica en el 1% mensual (equivalente a una tasa anual del 12,7%), estos pesos podrían colocarse en instrumentos que rinden por encima del 30%. Esto genera ganancias virtualmente libres de riesgo para quienes acceden al mercado oficial”, graficó.
En las últimas semanas, algunos inversores ya comenzaron a anticiparse para fijar tasas de colocación de pesos a niveles mayores, conscientes de que una baja en la tasa de devaluación podría estrechar las oportunidades futuras.