Le piden al exgobernador que tenga más territorio y que atienda la interna local. Alarmas prendidas por la “dedocracia” y los "acuerdos de cúpulas”.
Intendentes del PJ alzaron la guardia tras la reunión de Gustavo Bordet con Cristina Fernández de Kirchner. (Foto: archivo del Congreso del PJ, en septiembre de este año, en Paraná).
La foto de Gustavo Bordet junto a Cristina Fernández de Kirchner alborotó el avispero al interior del peronismo de Entre Ríos. Principalmente, entre intendentes que consideran que la imagen no aporta a la discusión que todavía está pendiente en la provincia. Algunos advierten que la imagen les quita “visión de futuro”.
Como contó Letra P, el encuentro entre Bordet y CFK sorprendió por impensado. Lejos de ser kirchnerista, el exgobernador se mostró durante toda su gestión, y después también, como un constructor de espacios alternativos al de la expresidenta, desafiando su liderazgo dentro y fuera del Partido Justicialista. Hay quienes plantean como obvio que la foto es la cristalización de un acuerdo entre Cristina y Sergio Massa, sobre todo por la presencia de Guillermo Michel, hombre de referencia del exministro de Economía, no solamente en la provincia.
Justo cuando el peronismo debatía la apertura de sus discusiones, la incorporación de minorías y la conversación interna para la definición de candidaturas, la foto de Bordet con Cristina cayó como una piedra en medio de un gran charco, un día después de la lluvia. Nadie la vio venir y lo que salpicó dejó manchas que no se sabe si podrán borrarse.
No hay un cuestionamiento fuerte hacia el encuentro en sí, porque todos reconocen que son tiempos de diálogo y que una reunión no se le niega a nadie, pero señalan lo inoportuno del mensaje, sobre todo entre quienes vienen impulsando “un peronismo a la entrerriana”. “No nos interesa estar en contra de Cristina, pero hoy el peronismo está discutiendo otras cosas, no liderazgos nacionales”, comentó un referente comunal, ante la consulta de Letra P. “Acá los compañeros quieren hablar ellos, no tenemos conducción y es una trampa meterse en la disputa nacional”, agregó.
En el entorno de José Eduardo Lauritto, uno de los que milita “la fuerza de los intendentes que ganaron”, advierten que la foto de Bordet con Cristina fue un error. “Está claro que fue a buscar la bendición para una candidatura y es una torpeza buscar bendiciones tan temprano”, argumentaron. En el mismo sentido, pusieron en crisis la representatividad de quienes se sentaron en esa mesa. “¿A quiénes representan? ¿En nombre de quiénes van? Son arreglos personales en el marco de bastante egoísmo”, apuntaron. En la gestión de Concepción del Uruguay se sientan y esperan. Saben que, en algún momento, el armado demandará de las grandes ciudades. Lo que piden es “no ser usados” para militar candidaturas surgidas de la "dedocracia".
Como en el entorno de Lauritto, hay otras voces que ponen de relieve que la búsqueda de cercanía con la gente “se estropea con acuerdos de cúpulas” y piden más territorio y menos escritorio. “Hay gente que está legitimada y esa gente es la que ganó, son los intendentes que ganaron sus ciudades cuando el peronismo en la provincia perdió”, recuerdan.
El intendente de Concepción del Uruguay, sin embargo, no le cierra la puerta a nadie. Para esta semana, según supo Letra P, está planificado un encuentro organizado por Michel en espejo al que inauguró "las conversaciones entre compañeros" en Paraná. En aquella oportunidad, el ex titular de Aduanas convocó con las figuras de Diego Bossio y Roberto Feletti para analizar el Presupuesto 2025. Para este jueves, a la costa del Uruguay llegarían Bossio y Daniel Arroyo, con un enfoque social del encuentro.
La intendenta de Paraná es el emblema de quienes ganaron y tienen territorio. Rosario Romero retuvo para el peronismo la gestión de la capital y lleva adelante su gobierno haciendo equilibrio entre su rol de jefa comunal y de presidenta de la Liga de Intendentes del PJ. Desde ese lugar, viene cumpliendo un pedido de los alcaldes: abrir el juego. En ese punto, en su entorno enmarcan la crítica a Bordet por su encuentro con Cristina. “No es mirar al futuro”, resumen.
Como desde la otra orilla, los cuestionamientos en Paraná apuntan a los acuerdos de superestructuras y prenden alarmas sobre la voluntad de digitar candidaturas desde Buenos Aires. Reconocen el mensaje de un acuerdo entre Cristina y Massa y desde ese punto de partida miran a 2025. “¿Para qué se reúnen? Para decir que están arreglando todo desde La Meca”, respondió a Letra P una persona cercana a la gestión.
“Pensando en 2027, creemos que hay que enamorar a las mayorías, mirar para adelante, con candidatos nuevos”, insistió esa lectura desde Paraná. Romero cultiva un vínculo de respeto y cercanía con Bordet, fue su ministra de Gobierno y Justicia desde 2017 hasta 2023. Ante la consulta de este medio, prefirió no responder.