La Ciudad

El proyecto que puede dividir al bloque porteño de Larreta

El oficialismo necesita aprobar una ampliación presupuestaria y no tiene los votos garantizados de las bancas de López Murphy. El garante del cuórum.

La administración de Horacio Rodríguez Larreta depende de la Legislatura porteña para aprobar este jueves un proyecto clave de ampliación presupuestaria de más de $178 mil millones, pero por estas horas enfrenta un escollo que genera incertidumbre: la indefinición de uno de sus aliados, Republicanos Unidos, el bloque que responde a Ricardo López Murphy, que tiene dos bancas claves para sancionar cualquier iniciativa.

 

Tras el recambio legislativo de 2019, la coalición larretista, entre puros y socios, suma 32 escaños del total de 60 del recinto, una mayoría ajustada para sancionar leyes simples, ya que se requieren 31 voluntades para una victoria parlamentaria. Por eso, los dos lugares del espacio del bulldog que hoy ocupan Roberto García Moritán y Marina Kienast, que ya se encargaron de marcar distancia ante proyectos que emanan desde el oficialismo, se vuelven estratégicos esta semana.

 

Puertas para afuera, fuentes legislativas de color amarillo confían en tener los sufragios para aprobar la propuesta que amplía el presupuesto de la Ciudad en $ 178.553 millones, bajo un argumento inflacionario. Otras voces, en cambio, muestran cautela y abren el paraguas. La prudencia del caso responde justamente a que Moritán, como vicepresidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, no firmó el dictamen de la iniciativa. Desde su entorno, ante Letra P, advierten a los optimistas del cuórum, ya que describen que tanto él como su compañera de espacio están estudiando los pormenores del texto. Dejan la puerta abierta: ambos no cuentan "con una postura concreta". 

 

Las divergencias de Republicanos Unidos con el espacio del jefe de Gobierno nacieron desde la primera sesión y prometen continuar ya que, como avisaron ambas espadas del exministro de Economía, desde el momento de asumir en Perú 160 prometen mantener su propia agenda, sin ocultar divergencias. “Es el espíritu de esta gran coalición que es Juntos  por el Cambio, mantener la identidad de cada espacio”, justificó el diputado de fama mediática desde su casamiento con la conductora de televisión y modelo, Carolina Ardohain.

 

No es un capricho: hay un motivo esencial por el cual la gestión Larreta necesita la norma. Tal como informó el subsecretario de Hacienda, Gustavo Arengo Piragine, durante su exposición ante los legisladores de la Comisión, las proyecciones del Presupuesto 2022 se vieron afectadas por la crisis económica a flor de piel que se hace sentir en la Ciudad incluso ante de la renuncia de Martín Guzmán como ministro nacional. En el texto porteño, según sus previsiones originales, la inflación estaban estimada en el 33%. Los privados ya duplican esa previsión como piso.

 

El funcionario larretista, asimismo, recalcó que la ley “propone una ampliación de $ 63.243 millones en los créditos asociados al gasto en personal". "Esta mayor erogación tiene su origen en los acuerdos salariales alcanzados con las organizaciones gremiales que representan a los trabajadores de la Ciudad”, apuntó Piragine. 

 

Hay más: habrá $ 33.193 millones extra en concepto de mayores gastos originados en la prestación de los servicios de comida destinados a hospitales, escuelas, hogares, el Instituto de Seguridad Pública y la Policía de la Ciudad. Se incluyen, además, las erogaciones correspondientes a la limpieza de hospitales, la recolección de residuos, la seguridad privada, los servicios de mantenimiento y reparación de equipos médicos, entre gastos previstos.

 

Por el lado de los bienes de uso, se incluye la ampliación de las erogaciones referidas a gasto de capital por $ 42.373 millones y que serán destinados a atender los requerimientos de inversión en obras y equipamiento de diversos ministerios. También se estiman $ 26.473.498 para la compensación tarifaria a los servicios de subterráneo y transporte automotor de pasajeros del área urbana. 

 

José María Carambia, senador del bloque de Santa Cruz. Complica el cuórum a Victoria Villarruel. 
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