El gobernador Axel Kicillof convocó a estatales y docentes para empezar a discutir la pauta salarial 2025 a partir de la semana que viene y en un escenario de incertidumbre por la falta de ley de Presupuesto. Con el llamado busca descomprimir la presión de gremios, algunos de ellos aliados políticos de la administración bonaerense, que reclamaban ser convocados desde principios de enero.
Según la convocatoria del Ministerio de Trabajo, el miércoles 5 de febrero se hará la primera ronda de conversaciones, primero con los sindicatos docentes y después con la planta de trabajadores estatales y de salud pública.
Presión de los gremios
Por ahora, desde el gobierno no hay señales sobre el horizonte de mejora salarial que pondrá sobre la mesa de negociación en un escenario marcado por el techo del 1 por ciento para las paritarias que buscó establecer el gobierno de Javier Milei desde fines del año pasado. Kicillof está condicionado, además, por la falta de Presupuesto, frenado en la Legislatura por la combinación de lo hecho por la oposición y, también, por la interna del peronismo.
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Por eso, el gobierno bonaerense pateó durante enero el llamado a los gremios, incumpliendo un compromiso que había tomado en la última paritaria del año pasado. El malestar entre los sindicatos por la incertidumbre y el silencio del Ejecutivo se fue extendiendo y hubo un reclamo para que Kicillof vuelva a abrir la negociación.
Promesa incumplida
El último aumento salarial que otorgó la Provincia fue en el mes de noviembre. Aquella vez, pagó la segunda cuota de la mejora bimestral del 8 por ciento cuya primera parte se liquidó en octubre. En diciembre, los estatales y docentes no tuvieron aumento, una decisión que el gobierno de Kicillof apoyó en la necesidad de contar con los fondos para hacer frente al pago del aguinaldo.
En ese marco, desde los tres sectores de estatales con silla en la mesa de paritaria, ATE, Fegeppba y UPCN, reclamaron en enero a Kicillof que los llamara a empezar a discutir la pauta 2025 y una posible suba retroactiva a diciembre.
Con las negociaciones por el Presupuesto 2025 caídas, el ejercicio 2024 prorrogado por decreto y sin autorización de endeudamiento, se abren interrogantes sobre si el gobernador podrá sostener la pauta de aumento salarial que se aplicó en los últimos cinco años, en sintonía con la inflación.