La mayoría contundente que logró La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados para aprobar la suspensión de las PASO vaticina un escenario favorable para Javier Milei en el Senado, pero el Gobierno aún debe juntar los votos. La resistencia de un sector de la UCR lo obliga a sumar respaldo de gobernadores de Unión por la Patria.
En la cámara baja fue decisivo el apoyo de los mandatarios Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Raúl Jalil (Catamarca). Sus diputados aportaron las firmas decisivas para dictaminar la suspensión el martes. Ignoraron el comunicado del bloque UP, que anunció que no habría firmas y ayudas para el cuórum.
En rigor, Zamora y Jalil no aportaron para el cuórum -no eran necesarios-, pero sí dieron votos para aprobar el proyecto. En el Senado reúnen cuatro bancas claves, porque La Libertad Avanza, si no pide ayuda a UP, sólo puede juntar 37 voluntades, lo justo para el cuórum. Pero tal vez en la cámara alta sea necesario el aporte de otras provincias.
Por tratarse de una ley electoral, sólo puede ser sancionada con ese número: es decir, el Gobierno necesita compromiso para abrir el recinto y votar. El cronograma de la Casa Rosada es que en la cámara alta haya una sesión el 19 o 20 de febrero, un día antes del final de las sesiones extraordinarias.
La PASO, en manos de la UCR
Con el PRO y los partidos provinciales decididos a borrar las PASO, en el Senado el foco oficial está puestos en la UCR. Quizá la única noticia mala que tuvo Guillermo Francos de la votación de Diputados es que entre los pocos radicales que no votaron a favor de la suspensión está el sector del senador Maximiliano Abad, representado en la cámara baja por Karina Banfi y Fabio Quetglas. El otro radical que ya avisó que no ayudará en el Senado es Pablo Blanco.
Evolución, el sector del senador Martín Lousteau, votó dividido en la cámara baja: Danya Tavela lo hizo a favor y se abstuvo Carla Carrizo, la más leal al economista, otro dato que debe ser mirado con lupa en la Casa Rosada.
5d97096a-cb11-45fe-bd46-448e4d787d67.jfif
La suspensión de las PASO pasó el filtro de Diputados con un número holgado.
Algo más a tener en cuenta por el Gobierno es el intento, sin éxito, de bloquear el dictamen que hizo el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo. Recién cuando se quedó en minoría, facilitó la firma del dictamen el martes. En el Senado, el mandatario tiene dos votos para resistir la suspensión.
Militará a favor de la eliminación la dupla correntina (Eduardo Vischi y Mercedes Valenzuela), mientras que el resto del bloque definirá su postura en los próximos días y hay mayoría de outsiders. Por caso, Carolina Losada y Eduardo Galaretto, son de Santa Fe, donde las PASO están vigentes a nivel local. La periodista está enfrentada a su gobernador, Maximiliano Pullaro, quien mandó a su diputada Melina Giorgi a votar la suspensión.
El pampeano Daniel Kroneberger no tiene jefes nacionales, al igual que la entrerriana Stella Olalla, quien de todos modos no tardará en ser abordada por su gobernador, Rogelio Frigerio, quien presionó y logró que el radical Atilio Benedetti votara la suspensión este jueves.
Ayuda peronista
Zamora puede ayudar con tres votos para sancionar la suspensión de las PASO: Gerardo Montenegro, Claudia Ledesma y Julio Neder. Jalil sólo controla a Guillermo Andrada, quien se encuentra de viaje. En el bloque dicen que no volverá hasta marzo. La otra representante de Catamarca es la exgobernadora Lucía Corpacci.
Como explicó Letra P, en UP hay una interna fuerte en el Senado porque una decena cuestiona la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner en el PJ nacional. En diciembre decidió darle un plazo a su conducción para definir si siguen el bloque. Para sancionar la suspensión de las PASO, tal vez el jefe de Gabinete necesite que algunos mandatarios peronistas que enviaron a sus diputados a abstenerse, faciliten la ley en el Senado.
Son los casos de Ricardo Quintela (La Rioja), que controla el voto de Jesús Rejal y María Florencia López en la cámara alta; y Sergio Ziliotto (La Pampa), representado por Pablo Bensusán. Otra carta de la Casa Rosada son exmandatarios que siempre se opusieron a las PASO, como el senador Sergio Uñac; o el puntano Fernando Salino, quien respondió siempre a Alberto Rodríguez Saá.
El gobernador Osvaldo Jaldo, de Tucumán, podría acercar a Sandra Mendoza, quien sólo algunas veces obedeció sus pedidos de colaborar con el Gobierno. Esta vez tendrá que ayudar.