Los periodistas se juegan una parada grande el 13 de abril. La banca departamental para la convención viene con la chance de quedar posicionado a futuro.
Del periodismo a la política. Ciro Seisas y Juan Pedro Aleart, rivales en la elección constituyente del departamento Rosario.
Ciro Seisas y Juan Pedro Aleart disputarán una de las peleas más picantes de la elección a convencionales constituyentes de Santa Fe. Con la potencia propia de outsiders de altísimo conocimiento, ambos periodistas se juegan presente y futuro en el Departamento Rosario en un mano a mano con aroma a plataforma 2027.
Seisas no es debutante, pero desde su salto a la política cosechó dos victorias en dos años. Venció de manera ajustada en la categoría de concejales de Rosario en 2021 y triunfó categórico para llegar a senador en 2023, incluso sacando más votos que el propio gobernador Maximiliano Pullaro en el departamento (315 mil a 301 mil). Ahora se enfrenta a una elección que puede resultar bisagra para sus intereses.
Aleart sí debuta y es, en efecto, el candidato más taquillero de La Libertad Avanza(LLA) en Santa Fe. Compite en dos categorías, a convencional departamental (versus Seisas) y a concejal de Rosario. Tiene, por un lado, todo el aire fresco de un outsider con el nylon en el lomo, pero por el otro, la rabia libertaria que caracteriza al oficialismo nacional. ¿Plafones contradictorios? Se verá en campaña.
Pablo Javkin ya avisó que transita su último mandato y es, por ese motivo, que la pelea entre los exconductores del prime time de Canal 3 adquiere un relieve de notoriedad. Es verdad que también compiten en la categoría el intendente de Funes, Roly Santacroce, y el diputado peronista Germán Martínez, pero los periodistas son favoritos. Es un facto.
Quien gane quedará posicionado en la carrera 2027 al Palacio de los Leones. Si Aleart pierde, tiene la otra carta, la del Concejo. En el gobierno provincial siguen de cerca la competencia y leen un escenario de paridad en las primeras encuestas que recibieron, rasgo que, a 45 días de la votación, leen como una ventaja para Seisas.
Javkin tiene un antecedente propio para ser cauteloso. Dos años antes de asumir, en 2017, terminó tercero detrás del dirigente del PRO Roy López Molina y el peronista Roberto Sukerman. Quedó a 20 puntos del ganador. Al amarillo le pusieron alfombra roja a la intendencia, pero la taba se dio vuelta y el de Unidos sucedió a Mónica Fein.
La contienda de medio término puede que no dirima nada ante semejante antecedente, pero sí determina, posiciona y va aclarando el panorama. De alguna manera, se le va poniendo nombre propio al escenario de tercios que puede regir en 2027, porque el peronismo se anota para esa compulsa con Juan Monteverde y Lisandro Cavatorta, que, si bien no compiten en la departamental, construyen con pilar en Rosario.
Para Unidos, Rosario es un tema especial. Porque la gestión en seguridad del gobierno de Pullaro logró bajar fuertemente la cantidad de homicidios y está en marcha un plan muy ambicioso para dotar a la ciudad de obra pública de calidad. Con todo, sin Javkin como candidato local en 2027, debe ir encontrando nombres que representen el futuro de la coalición. Si Seisas le gana a Aleart, casi que es número puesto. Aún perdiendo, seguirá con la fortaleza que le da la banca del Senado.
Para LLA, es Aleart y nadie más. A presente y futuro. Si el periodista gana las dos categorías, la fuerza libertaria encontrará un líder en la convención reformista y un faro en el Concejo de Rosario. A priori, la elección local asoma más accesible para sus intereses. Si pierde todo, se siembra un interrogante bastante grande sobre su figura.
No obstante, para la teoría de los tercios a la santafesina, si el dúo mantiene y profundiza el espadeo tuitero no puede hacer otra cosa que perjudicarse entre sí. En el gobierno provincial observan que es mucho más importante el contraste con el peronismo que con otra fuerza y que la disputa que pretendan concretar Seisas y Aleart tiene olor a interna para el electorado, cuando en realidad lo que se pone en juego es otra cosa. Es una sola elección y Unidos y LLA comparten el grueso de su electorado. Es inservible y hasta inconducente el enfrentamiento de dos, según la mirada de la Casa Gris.