El Presidente y Karina Milei recibieron al quinteto. Obras, deudas y la hidrovía, en el temario. Pullaro puso sobre la mesa los agravios al caudillo radical.
Javier Milei, Karina Milei y los gobernadores radicales.
Pese a haber lanzado duras críticas contra Raúl Alfonsín, y haber auspiciado en paralelo el quiebre del radicalismo en el Congreso, Javier Milei le sacó provecho este martes a una reunión con los cinco gobernadores de la UCR, con quienes tuvo un principio de acuerdo para avanzar con el Presupuesto 2025 y frenar otros temas sensibles para la Casa Rosada. El quinteto le dejó una batería de reclamos y se llevó un gesto de buena voluntad presidencial.
El almuerzo que se extendió por más de dos horas y media en el tradicional Salón de los Científicos del primer piso de la Casa Rosada, tuvo como principal novedad en la dinámica libertaria la presencia de Karina Milei, la secretaria General de la Presidencia, que volvió a mostrarse al frente de las negociaciones con la oposición.
Participaron los gobernadores Maximiliano Pullaro, de Santa Fe; Carlos Sadir, de Jujuy; Gustavo Valdés, de Corrientes; Alfredo Cornejo, de Mendoza; y Leandro Zdero, de Chaco. Los cinco insistieron con la reactivación de las obras públicas en sus provincias, el pago de deudas que mantienen con la Nación, sobre todo aquellas que tienen que ver con las cajas previsionales y la necesidad de avanzar con el proceso de licitación de la hidrovía.
"Para nosotros es fundamental estar encima de la licitación de la hidrovía que está llevando adelante el gobierno nacional, porque nuestras provincias son litoraleñas, y entendemos que para un diseño de desarrollo en infraestructura, no basta con hablar del calado y del balizamiento”, avisó a la salida Valdés.
Por el lado de la agenda de la Casa Rosada, contaron fuentes oficiales, en el encuentro Milei se habría llevado el aval del quinteto radical para ponerle un freno a la posible modificación de la ley que regula los DNU y el respaldo para avanzar con la privatización de Aerolíneas Argentinas, un proyecto del PRO que el Gobierno decidió reflotar en su enfrentamiento con los gremios aeronáuticos.
En el medio de la rosca de gestión, el nombre de Alfonsín apareció una única vez. Fue Pullaro quien lanzó sobre la mesa un esbozo de queja por las agresiones de Milei al exmandatario radical. “Lo de Alfonsín es la frescura que tiene Milei”, intentó esquivar la polémica que atravesó al centenario partido el correntino.
Con Alfonsín a la pasada, según pudo saber Letra P, la reunión de este martes se dio en buenos términos y ambos lados de la mesa evitaron tocar estos temas sensibles y circunscribirse a la gestión. “Tenemos equilibrio fiscal, hablamos de cómo vamos a hacer para invertir y motorizar la economía, para salir de la difícil situación en la que nos dejó el kirchnerismo”, remarcó Valdés.
El jefe de Estado y sus principales funcionarios ya se habían reunido en las últimas semanas con la mayoría de los actores políticos de la oposición que lo respaldaron en algunos de sus proyecto troncales, desde la Ley Bases y el Pacto Fiscal, hasta su insistencia de sostener los vetos a la leyes de financiamiento universitario y aumento a las jubilaciones, por lo que ahora además de buscar el respaldo para avanzar con el Presupuesto 2025 y ponerle un freno a la posible modificación de la ley que regula los DNU, también quedó en evidencia las intenciones de sacar cierto provecho de la fragmentación del radicalismo.
Ya es una jugada de manual del Goobierno: Milei no sólo mantuvo reuniones con radicales y macristas aliados, como la cumbre privada entre Santiago Caputo y Cristian Ritondo hace algunos días, sino también con mandatarios peronistas que desconocen la conducción de Cristina Fernández de Kirchner en el Partido Justicialista, como Osvaldo Jaldo, de Tucumán y Raúl Jalil de Catamarca, además de sus exaliados del Frente de Todos Gustavo Sáez, de Salta y Hugo Passlacqua, de Misiones.
A pesar de que la previa se cargó con el affaire Alfonsín y de la vandalización del despacho de Martín Lousteau en el comité nacional de la UCR, que Milei puso en duda, lo cierto es que la cita del Presidente con los radicales estaba planificada para la semana pasada y se pospuso.