Fue en una cumbre secreta en San Fernando. El tigrense quiere dar por superada la novela del PJ. El Presupuesto 2025, obras y reforma electoral, en el listado.
Axel Kicillof y Sergio Massa
Sergio Massa le presentó a Axel Kicillof una agenda de temas sobre los que cree posible avanzar en los próximos meses en Buenos Aires, que incluye: el desdoblamiento de las elecciones legislativas 2025, una reforma electoral, un plan para avanzar con la cobertura de vacantes en la Suprema Corte de Justicia y poner sobre la mesa la reelección de los intendentes.
El excandidato presidencial y el gobernador bonaerense charlaron sobre estos temas en un encuentro que mantuvieron el viernes en San Fernando. Massa ofició de anfitrión de una delegación bonaerense que también incluyó a los ministros Carlos Bianco (Gobierno), Andrés Larroque (Desarrollo para la Comunidad) y Gabriel Katopodis (Infraestructura); y a Agustina Vila, secretaria general, y Cristina Álvarez Rodríguez (jefa de asesores).
Aunque el diálogo entre ambos exministros de Economía es fluida, la reunión fue planteada para poner sobre la mesa cuestiones que en el massismo consideran de urgente resolución, superada la novela de la interna del PJ nacional con la entronización de Cristina Fernández de Kirchner.
El menú massista de apremios incluye una serie de definiciones electorales que el gobernador debe tomar ante el debut el año próximo de la Boleta Única en Papel (BUP) para la elección nacional, que impactará y mucho en la elección bonaerense, con alcances todavía inciertos.
Massa cree que el peronismo debe plantear las condiciones de una negociación amplia con sectores de la oposición distrital para llegar a un acuerdo que incluya no solo la cuestión electoral sino también el tratamiento del Presupuesto 2025 que ingresará el martes que viene a la Legislatura, junto a las obras públicas y las cuestiones judiciales, otra obsesión del massismo.
Para avanzar sobre esos temas, el excandidato repite que la condición es bajarle el volumen a la interna.
La principal preocupación del massismo es electoral. Obligado a jugar a nivel nacional para conservar su tropa legislativa en el Congreso, Massa mira con especial atención lo que ocurre a nivel bonaerense, donde el Frente Renovador es socio principal del acuerdo con Kicillof, pero también de Máximo Kirchner.
El debut de la boleta única obliga a Buenos Aires a tomar una decisión: desdoblar la elección bonaerense para una fecha anterior a octubre o convocar a comicios simultáneos, pero con dos sistemas (y urnas) diferentes; con una papeleta para cargos nacionales y otras tradicional para cubrir los cargos en la Legislatura. Como sea, la BUP alterará el escenario electoral en Buenos Aires.
Massa le transmitió a Kicillof que, a su entender, la mejor alternativa es avanzar con un desdoblamiento de la elección bonaerense, un viejo proyecto que el gobernador debió archivar en 2023 por la propia interna peronista. Para el tigrense esa negociación tiene que empezar cuanto antes. Para Buenos Aires implica un desafío enorme: como siempre fue a votar en simultáneo con Nación, la provincia nunca organizó una elección legislativa propia. Ahora debería hacerlo en pocos meses y gracias a una importante inyección presupuestaria.
Pero el exministro cree que es momento de plantear la discusión por una reforma más profunda del sistema electoral bonaerense, con el Frente Renovador parado como actor principal de esos acuerdos. Hay varias ideas que sobrevuelan las mesas de rosca local, entre ellas que se vote a través de un sistema de elección por distrito único. En el massismo no dan precisiones.
La agenda massista también tiene un capítulo judicial. El exministro habló con Kicillof sobre la situación de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, que actualmente funciona con tres de sus siete integrantes. Hay cuatro sillones vacíos desde la jubilación de Luis Genoud, en junio, y Massa cree es posible avanzar con acuerdos con el resto de la dirigencia para ocuparlos.
Para eso, propone una negociación amplia con la oposición que incluya también un posible recambio en la Procuración de la Corte, donde Julio Conte Grand resiste en base a acuerdos propios más que a los apoyos políticos que lo llevaron al cargo, y en otros sillones de peso de la Justicia bonaerense.
En la negociación con la oposición entraría además el proyecto de Presupuesto 2025 y otro anzuelo que puede servir para la búsqueda de acuerdos con el radicalismo: la marcha atrás a la ley que limitó las reelecciones de intendentes.
Después de la prohibición de mandatos indefinidos aprobada en la gestión de María Eugenia Vidal, se avaló una reelección más para los alcaldes. Con la mira en 2027, puede ser una buena prenda para tentar a parte del radicalismo y del PRO para sentarse en la mesa de negociación.