La citación a sesiones extraordinarias se convirtió en otro tema de fuerte debate interno en el Congreso, que por ahora mantiene las puertas cerradas. Javier Milei decidió definir la convocatoria recién después de la sesión preparatoria de Diputados del miércoles próximo, cuando espera que no haya problemas para que Martín Menem sea reelecto como presidente de la cámara baja.
En el oficialismo hay optimismo en tener consenso para que el riojano sea reelegido, pero también cautela. La expectativa está puesta en Unión por la Patria que tendrá reunión a las 18 horas. "Si se abstienen, es un triunfo", dicen en el despacho principal de la cámara baja. Cabe recordar que si no hay sesión, las autoridades se renuevan de forma automática.
Superado ese episodio, Milei se sentará a definir un nuevo temario, que al menos hasta este lunes no incluiría el Presupuesto 2025, como le prometió a los gobernadores hace una semana. Esta omisión podría vaciar las sesiones, según amenazan desde todos los bloques opositores, pero en la Casa Rosada están dispuestos a aceptar ese desafío. Achicar los plazos es riesgoso: sólo quedarían dos semanas en diciembre para tratar todos los proyectos.
Como explicó Letra P, Santiago Caputo es el más interesado en no cerrar los recintos hasta el año próximo y propone tratar la eliminación de las PASO, la reforma del sistema de financiamiento de partidos políticos y la privatización de Aerolíneas Argentinas. Al asesor estrella no le importa si tiene los votos, sino que apuesta al principio de revelación, como se llama a la misión de exponer a quienes se oponen a las tendencias de época.
Es un objetivo que suena atractivo desde el Poder Ejecutivo pero no tanto en el parlamento, donde los jefes oficialistas suelen esquivar las derrotas. Fue lo que intentó Menem en su última reunión con Karina Milei, cuando le advirtió que no tenía contados los votos para aprobar alguna de las iniciativas que Caputo quiere incluir en extraordinarias. Este lunes, el vocero Manuel Adorni, quien habla a diario con Karina, no confirmó el llamado a extraordinarias.
El temario de Javier Milei
En caso de definirse una extensión de la actividad parlamentaria, entre martes y miércoles habrá una reunión en el Gobierno para definir los proyectos incluidos. "Todo cambia minuto a minuto", es la broma recurrente entre los jefes legislativos cuando se les pregunta por el temario.
En una entrevista radial, este fin de semana el jefe del PRO, Cristian Ritondo, exigió que el Presupuesto 2025 esté entre los proyectos de una próxima sesión. En Democracia Para Siempre, el nuevo bloque radical, tienen decidido condicionar su participación a la ley de leyes; mientras que en Encuentro Federal predomina la misma posición, pero son cautos: "hay que esperar la convocatoria y opinar después", es la frase de sus voceros.
En el radicalismo también piden por el Presupuesto y, además, al igual que el PRO y la Coalición Cívica levantan la bandera de Ficha Limpia, el proyecto para proscribir candidatos acusados por corrupción que se cayó la semana pasada por una maniobra del oficialismo.
Si el tema es omitido del decreto, de mínima, el oficialismo deberá dar explicaciones en el recinto, durante un sinfín de cuestiones de privilegio. Es en esas circunstancias cuando confronta el principio de revelación con el pragmatismo legislativo. Bajo el primer concepto, perder no es una derrota. Para quienes están dentro del recinto, siempre lo es, mucho más si es acompañada de un foro de hostilidad.
Agenda Senado
La otra parte de la agenda de extraordinarias es el Senado, que fue cerrado la semana pasada por orden del Poder Ejecutivo, acatada por Victoria Villarruel, para evitar que Unión por la Patria filtraran temas hostiles en las reuniones de labor parlamentaria. El mayor temor era el DNU 846, que flexibiliza las condiciones del canje de deuda.
Esa decisión dejó archivado proyectos de interés para el ejecutivo como el aumento de penas por participar de organizaciones delictivas, denominada ley antimafia, el único proyecto de Patricia Bullrich que pasó el filtro de Diputados. Las amenazas de bandas narcos se convirtieron en un marco propicio para revitalizar esta iniciativa.
Es uso y costumbre en extraordinarias incluir pliegos pendientes, sin especificar cuáles, para de ese modo tratar en conjunto los ascensos militares -un trámite necesario cada fin de año-, diplomáticos y los judiciales, si los hubiera. Se estima que Milei quiere ratificar al embajador en Estados Unidos, Alejandro Oxenford. Podría dejar abierta la puerta a debatir los pliegos de la Corte Suprema. Por ahora, es una negociación inconclusa.