Envió una señal con la elección de uno de sus operadores políticos para el triunviro cegetista: no hay lugar para los que desafían su liderazgo.
Hugo Moyano junto al nuevo triunvirato de la CGT
Hugo Moyano se tomó un tiempo para resolver el reemplazo de Pablo Moyano en uno de los sillones del triunvirato que gobierna la CGT. Después de la renuncia de su hijo mayor, el secretario general de Camioneros jugó al misterio por dos semanas y terminó inclinándose por Octavio Argüello, dirigente de su extrema confianza y uno de sus armadores políticos.
Con ese movimiento, Moyano padre recuperó desde las sombras su lugar en la mesa chica cegetista, con un claro mensaje de liderazgo a los críticos de su conducción, y confirmó su decisión de aislar a Pablo y a los sectores críticos para alinear a Camioneros a la estrategia dialoguista de la CGT.
La oficialización del reemplazante se hará este martes con el acto de presentación de Argüello como nuevo cosecretario de la CGT junto a Héctor Daer y Carlos Acuña. Se realizará por la tarde en la sede de la UOCRA. La confirmación llegó este lunes, con un breve comunicado de prensa de la central en el que se los ve a los tres nuevos triunviros abrazados frente a los cuadros de Juan Domingo y Eva Perón. Fuera de cuadro, pero junto a los tres, Hugo Moyano fue protagonista del anuncio.
Argüello es un tapado dentro de la danza de nombres que se abrieron en las últimas dos semanas tras la renuncia de Pablo Moyano en medio de críticas a la conducción dialoguista de la CGT. Desde un primer momento, Moyano padre, secretario general del gremio, se puso al frente para ocupar el vacío de Pablo, en diálogo constante con Daer y el resto de los dirigentes de la mesa de coducción cegetista, como Gerardo Martínez, de UOCRA; José Luis Lingieri (Obras Sanitarias) y Juan Carlos Schmid (Portuarios).
El primer nombre que circuló con fuerza en el entorno de Camioneros fue el de Jorge Taboada, secretario adjunto de la Federación Nacional de Camioneros y también hombre de extrema confianza del Hugo. Después, se agitó la versión del regreso del propio Moyano padre al sillón de una de las tres secretarías generales de la CGT, que ocupó entre 2003 y 2015.
Pero el viejo lider optó por un regreso desde un segundo plano y hacer pesar su influencia a través de uno de sus leales. Argüello, secretario regional de Camioneros en Tres de Febrero y San Martín e integrante la conducción de la la CGT regional San Martín, será quien ocupe formalmente el cargo, pero todo el poder estará en manos de Hugo. De esa forma, el líder camionero consolida su alianza con los dos sectores principales de la conducción cegetista, los "Gordos" -grandes sindicatos de servicios- y los gremios independientes con Luis Barrionuevo, Martínez de UOCRA y Andrés Rodríguez de UPCN como caras visibles.
Moyano padre ya venía dando señales de acercamiento a los dialoguistas y de alejamiento con su hijo Pablo, con quien lo separa una vieja disputa familiar. Meses atrás, participó de la comitiva cegetista que visitó la Casa Rosada para entrevistarse con Guillermo Francos. Además, mantiene contactos cercanos con otros integrantes del gobierno libertario, como el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona.
La decisión ponerse al frente activamente del representante de Camioneros en el triunvirato de la CGT aisló todavía más a Pablo Moyano, que desde su salida de la central obrera se mantiene en segundo plano. Padre e hijo están enfrentados en una pelea familiar que repercute adentro del gremio: Hugo, por caso, ya había desplazado a Pablo de las negociaciones paritarias de Camioneros.