La interna del peronismo en la provincia de Buenos Aires está al rojo vivo y tuvo un nuevo capítulo este viernes en la gobernación bonaerense, durante un acto de firma de convenios. El intendente de Lanús, el camporista Julián Álvarez, cruzó a Axel Kicillof: delante de otros jefes comunales del oficialismo y de la oposición, dijo sentirse “maltratado” y se quejó por demoras en la entrega de fondos y la realización de obras. El gobernador respondió y otros jefes territoriales criticaron la actitud del lanusense.
El tenso momento se vivió en el marco de la firma de contratos Leasing del Banco Provincia “Municipios Bonaerenses 2024” con 29 intendentes, del oficialismo y de la oposición, en el Salón Dorado de la gobernación. Fue horas después de que naufragara en la Legislatura el tratamiento de los proyectos de Presupuesto y ley fiscal, en gran medida consecuencia de la interna peronista entre Cristina Fernández de Kirchner - Máximo Kirchner y Kicillof.
El reclamo, el cruce y la respuesta de Axel Kicillof
Según supo Letra P, el camporista le dijo a Kicillof que se sentía “maltratado” e hizo cuestionamientos por la coparticipación y las obras que recibía en su distrito.
Le reclamó por demoras en los trabajos y los fondos. Puntualizó que “antes” el Ministerio de Infraestructura pedía “solo dos requisitos” y ahora, bajo la conducción de Gabriel Katopodis, pide más requisitos y se atrasan las obras. También se quejó por la distribución de la coparticipación y puntualizó en fondos que la provincia le debe al municipio.
Julián Álvarez y Mayra Mendoza
Julián Álvarez y Mayra Mendoza.
Kicillof le contestó que la demora en las obras es un tema del que Katopodis lo mantiene al tanto y que no es un problema solo de la administración provincial. Respecto del Coeficiente Único de Distribución (CUD) mediante el cual se define la coparticipación a los municipios, le dijo que él sabe que no es discrecional.
El intendente de La Cámpora no solo recibió la respuesta del gobernador, sino también de parte del axelismo territorial. Lo cruzaron los intendentes Julio Marini (Benito Juárez) y Ricardo Alessandro (Salto). Le dijeron que ese no era el ámbito para hacer el planteo.
Todo roto
Intendentes cercanos a Kicillof salieron del encuentro enojados. Piensan que “no tiene justificación” un planteo semejante y menos delante de la tropa PRO y radical.
En el entorno de Kicillof prefieren restarle entidad al tema. “No vamos a entrar en ese juego”, dijo a Letra P alguien cercano al gobernador y prefirió no hacer “un show de esto”.
El tenso momento se dio horas después de que fracasara en la Legislatura el tratamiento de los proyectos de Presupuesto y ley fiscal impositiva y el endeudamiento enviados por el Ejecutivo. Durante las negociaciones, hasta bien entrada la noche del jueves, parte de los intendentes peronistas presionaron fuerte para obtener más fondos para sus municipios.
