La dupla empoderó a Gabriel Bornoroni. Malas noticias para el PRO, la UCR con peluca y Luis Juez. El llamado evangelizador y críticas a la casta. Los detalles.
En Córdoba, Karina Milei, Martín Menem y Gabriel Bornoroni anunciaron listas violetas para los turnos de 2025 y 2027.
Karina Milei ponderó a Gabriel Bornoroni como un jugador indispensable en Córdoba y abrió la gieta con otros referentes del espacio libertario.
El abrazo de los leones en Córdoba con Karina Milei, Martín Menem y Gabriel Bornoroni.
Karina Milei dedicó la previa del acto en Córdoba para escuchar a los referntes de la nueva generación libertaria.
Karina Milei y Martín Menem estuvieron en Córdoba por tres horas que bastaron para dejar en claro que tienen el joystick de la estrategia de La Libertad Avanza para 2025 y el 2027. La UCR con peluca, el PRO y el Frente Cívico de Luis Juez no participaron, pero los alfiles de Javier Milei hicieron sentir la fría distancia.
Con clima festivo y una ambientación rockstar ya identitaria, los dos tentáculos del Presidente lanzaron el partido a nivel nacional, tras la habilitación que la Justicia notificó el mismo viernes. El mensaje fue claro: las listas electorales serán ocupadas por dirigencia 100% violeta. Menem fue el responsable de dar la mala noticia para el espectro de Juntos por el Cambio. Karina asentía con la cabeza sus palabras.
Fue clave el rol que cumplió el jefe de la bancada oficialista en la Cámara de Diputados, Gabriel Bornoroni, en el armado del acto que se hizo en un boliche, en pleno centro de la capital, justo al frente de las oficinas del Banco Roela, propiedad de la desvinculada Diana Mondino.
El estacionero no le tembló la mano para dejar a gente afuera del evento: no pudo entrar el legislador de LLA, Agustín Spaccesi, ni la excandidata a intendenta capitalina, Verónica Sikora, quien dice tener diálogo frecuente con Milei. Sólo algunos de sus enviados pudieron infiltrarse.
Aunque dicen detestar la “política tradicional”, la cumbre de la secretaria general de la Presidencia y los dos brazos libertarios de la cámara baja tuvo bastante de esa liturgia. Para llenar el salón, partieron contingentes movilizados en colectivos desde los departamentos Santa María, Pocho, Punilla y de algunos barrios de la ciudad. En las filas de ingreso pudo verse presencia de las terminales cordobesas del PAMI y ANSES, los reductos de poder que maneja Bornoroni.
Esta semana, LLA consiguió los papeles en la Justica que lo habilitan como partido nacional. Al pelotón de autoridades lo encabezan la consanguínea de Milei y Menem. Bornoroni fue oficializado como el referente de la franquicia cordobesa.
La habilitación del partido le permite al ala libertaria hacer su propio juego y saltear las alquimias electorales que le garantizaron sellos para competir en 2023. En ese sentido, Córdoba fue la primera provincia que visitaron y en la que anunciaron la conformación del espacio. A partir de ahora, las cabezas libertarias visitarán cada distrito y pondrán en marcha la maquinaria violeta para dar pelea.
“Córdoba ha sido siempre el faro de la Argentina y en el ballotage sacamos casi el 75%”, envalentonó Menem a la militancia cordobesa. Sin dudas, el Presidente tiene a Córdoba entre “sus mimadas” por ser el principal distrito refractario a Cristina Fernández de Kirchner y de donde obtuvo apoyo contundente. Mauricio Macri disfrutó en otros tiempos de esas mismas mieles que hoy saborea Milei.
En las gradas del viejo teatro devenido en boliche se colaron banderas del flamante partido. La espera tuvo mayor duración que el propio acto, a raíz de que “El jefe” se reunió con la juventud de LLA y que lo tuvo a Menem como el último en llegar. Tras esa demora, cargó sobre sus hombros la disculpa oficial.
Desde que se abrieron las puertas del espacio sonó rock internacional, la música preferida de Milei. En las tribunas se ubicaron solamente jóvenes que emulaban los bailes del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
“La casta tiene miedo” y “Cristina presa” fueron los cantos que durante toda la noche agitaron las barricadas juveniles, que llegaron al recinto en columna y con gran alboroto.
Para el inicio, cuando el arranque del acto llevaba una hora y media de retraso, sobre la pantalla LED se proyectó un documental editado por el equipo de comunicación del líder de LLA. Cada vez que aparecieron Alberto Fernández, CFK y Sergio Massa, los abucheos altisonantes coparon el ambiente. Tampoco se salvaron los radicales Raúl Alfonsín, Fernando de la Rúa y Gerardo Morales.
Una vez que concluyó el video, tras media hora en pantalla, Karina Milei, Menem y Bornoroni eligieron el lado derecho del escenario para hacer el ingreso. Nada es casual. Cuando el diputado estaba pronunciando las primeras palabras, tres personas se desmayaron y Bornoroni replicó a Alfonsín: “Un médico a la derecha, por favor”.
Luego de recibir atención médica por el sofocante calor, el titular de la bancada oficialista pudo dar continuidad. Lo siguieron Menem y la hermana presidencial. Se fueron presentando unos a otros y no hubo lugar para más protagonistas. Desde un atril ubicado en el centro del escenario y con la pantalla de fondo, las tres espadas libertarias dejaron claro que “el límite es la casta”.
“El año que viene el Congreso se va a llenar de leones cordobeses”, pronosticó a coro la trinidad libertaria visiblemente emocionada. Sin hacer menciones a Juez, ni a ningún radical con peluca, dejaron claro que LLA tendrá candidaturas propias en los turnos electorales de 2025 y 2027.
Paralelamente, el líder del Frente Cívico y el diputado Rodrigo de Loredo compartían en el norte de la capital un encuentro de La Generación, junto a María Eugenia Vidal y el gobernador de Chubut, Ignacio Torres.
Seguidamente, los tres libertarios propusieron: “Evangelicen a cada vecino con las ideas de Milei”.
Bornoroni se puso en intérprete de Milei y dijo: “el Presidente tiene sus esperanzas puestas acá para que llenemos el Congreso de leones cordobeses”. En ese momento, el auditorio contestó: “la casta tiene miedo”.
Menem, vestido a tono con la militancia juvenil, dejó claro un mensaje que revolucionó el auditorio: “No le vamos a dejar los lugares a la casta”, dijo. A modo de catarsis, en el inicio expresó sentir un “gran cansancio” por las tareas llevadas a cabo en el año y las “presiones recibidas”.
Apuntes en mano, el jefe que la cámara baja intentó ordenar su discurso en torno a tres ejes: “de dónde venimos"; "dónde estamos" y "hacia dónde vamos”. No escatimó elogios hacia Bornoroni, a quien describió como “el cordobés que más ha trabajado por nosotros”.
En clave ideológica, y salvando a Carlos Menem, planteó que durante los últimos 20 años “los políticos se apropiaron de la vida, la libertad y la propiedad”. Criticó la despenalización del aborto y dijo que “seguramente, Milei será el mejor presidente de la historia”.
Por último, destacó que a fin de año se suspenderá el Impuesto PAÍS y que en los 11 meses de gobierno de LLA se reactivó la industria, el comercio y la venta de autos. “Los salarios le están empezando a ganar a la inflación y hemos declarado a la educación como esencial”, dijo. También, anunció la Boleta Única de Papel “para complicarles la vida a quienes nos la complicaron en los últimos 20 años”, finalizó.
Para el cierre, Karina Milei intentó empatizar con los locales y les dijo que su “sobrina de cuatro patas es cordobesa”. Al igual que Menem, valoró el accionar de Bornoroni durante las discusiones de la ley ómnibus y por liderar la batalla con la que el oficialismo logró mantener el veto a la ley de financiamiento universitario. “Con Martín son dos leoneses”, valoró la secretaria general de la presidencia.
Cuando Karina Milei concluía su discurso, alguien del público gritó: “lo queremos a Bornoroni de gobernador de Córdoba”. En ese momento, el diputado no pudo disimular su sonrisa, mientas Milei y Menem asentaban con la cabeza.
Al finalizar, la hermana presidencial eligió dos frases que sabe que le rinden muy bien. La primera de ellas fue: “si esto sale bien, ellos no vuelven más” y, la segunda: “Cuánto menos Estado, mejor se vive”.
Habrá que ver.