Un presunto caso de corrupción por el manejo de fondos de la Legislatura dejó a la vicegobernadora Gloria Ruiz al borde de la destitución del gobierno que comanda Rolando Figueroa en Neuquén. Se trata de un hecho inédito en la provincia a poco más de un año de asumir el cargo.
Lo que en definitiva era una tirante convivencia política, escaló a niveles nunca vistos desde lo institucional y hace mella en una provincia donde se exacerba la estabilidad jurídica para el arribo de inversiones en la extracción de hidrocarburos de manera no convencional.
“El que no trabaja en equipo, debe salirse”, vaticinó el gobernador de la Patagonia, apenas comenzaba a resquebrajarse el entorno de su compañera de fórmula, luego de que trascendiera la denuncia contra su hermano por el posible usufructo en su beneficio de fondos de origen parlamentario. Y atizó en la mañana de este martes: " Sea quien sea, tolerancia cero".
Estas declaraciones demuestran el quiebre total con Ruiz, que se encargó de justificar el revuelo jurídico y político en las pretensiones de Figueroa de ir por otro mandato, en 2027, mientras ella construía un perfil disidente acercándose a figuras libertarias como la vicepresidenta Victoria Villarruel.
“Acudiré a la justicia para requerir el debido proceso y el derecho de defensa de mi rol institucional. Si pretenden seguir avanzando con acciones sin apego a la ley, quedarán marcados en la historia democrática de Neuquén como quienes removieron a una vicegobernadora elegida por el pueblo”, se defendió la exintendenta de Plottier, luego de un fin de semana de resonante silencio.
Furia interna
Figueroa avaló a que su frente Neuquinizate, un bordado de corte provincialista que incluyó a sectores peronistas, radicales, del PRO y fagocitó al ramificado Movimiento Popular Neuquino (MPN), auspicie la suspensión “por inhabilidad moral” de Ruiz en la Legislatura.
La prueba del quiebre total en la relación se manifestó en el proyecto que lleva la firma de 24 representantes de la Cámara, justo los dos tercios necesarios para la sanción. La decisión es suspender a la vicegobernadora aduciendo “inhabilidad moral” apalancada en el escándalo que terminó con la salida de su hermano Pablo de la Casa de las Leyes, un reducto que funciona bajo la órbita legislativa.
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Investigación
El final de la relación se dio cuando trascendió el giro de fondos desde el parlamento a la Casa de las Leyes (CLL), “un espacio activo, dinámico e innovador que promueve la cultura y la identidad neuquina a través de actividades abiertas a la ciudadanía”. Hasta hace unas horas, antes de ser despedido, CLL era coordinada por Pablo Ruiz, hermano de la vicegobernadora.
La denuncia que presentó el Ministerio Público Fiscal afirma que Ruiz armaba plazos fijos con dinero proveniente del parlamento y se beneficiaba con los intereses.
Este hecho no fue el único de los que aportaron a la debacle política reciente. Se le reprochó un esquema de nepotismo en la estructura legislativa y debió enfrentar serios cuestionamientos por la negociación del presupuesto para 2025, cortocircuito que desató la furia en Casa de Gobierno.
Proyecto y polémica en Neuquén
Así las cosas, las bancadas cercanas a Rolo Figueroa definieron declarar “la apertura de un procedimiento” para evaluar “la inhabilidad moral de la vicegobernadora Gloria Argentina Ruiz para continuar en el ejercicio de su cargo, conforme lo dispuesto en el artículo 189, inciso 25, de la Constitución Provincial”.
En definitiva, los 24 firmantes en un cuerpo de 35 bancas (los dos tercios necesarios), procuran “la separación preventiva del cargo como medida precautoria y temporal” de Ruiz, mientras dure la investigación, ”en aras de proteger y garantizar el correcto desarrollo del proceso”.
Si este martes, la comisión convocada para las 17, avala una sesión extraordinaria para el miércoles, y como todo indica, se creará una comisión investigadora con los presidentes de los bloques con el objetivo de avanzar en un informe final, en un plazo de 30 días hábiles, que signarán el futuro de Ruiz.
El proyecto lleva la firma de la bancada del MPN, el PRO, y otros sellos aliados al gobernador. La sumatoria de los firmantes alcanza los dos tercios, avalando así la jugada del gobierno para correr de la escena a quien fuera un escollo en el primer año de mandato.