SANTA FE

Por qué Maximiliano Pullaro ungió a dos damas de hierro del PS y el PRO para cuidar las empresas públicas

Las razones del gobernador para los cambios anunciados en Nochebuena. La pelea contra los sindicatos, en el centro de los desafíos para las funcionarias.

A más de un año de su asunción como gobernador y en la víspera de Nochebuena, Maximiliano Pullaro realizó su primer recambio de gabinete. La salida de un radical santafesino de la conducción de una empresa pública generó un efecto dominó que terminó empoderando a dos damas de hierro en lugares estratégicos.

El radical oriundo de Santa Fe, Hugo Marcucci, dejó la conducción de la Empresa Provincial de la Energía, que fue asumida por la socialista Anahí Rodríguez, quien viene de estar al frente de Aguas Santafesinas. El movimiento tuvo un correlato: al frente de la empresa encargada de brindar agua potable quedó la PRO Renata Ghilotti, cuyo anterior cargo de secretaria de Transporte y Logística fue asumido por quien venía ejerciendo de subsecretaria, la socialista Mónica Alvarado.

En un primer análisis, podría decirse que el socialismo ganó y sigue copando la segunda línea del gabinete de Unidos para Cambiar Santa Fe: entregó la conducción de ASSA y a cambio pudo colocar a dos figuras propias en la Secretaría de Transporte y Logística y en la EPE, la empresa pública más grande de la provincia. Sin embargo, en el Ministerio de Desarrollo Productivo negaron la lectura: “No fue una cuestión partidaria, sino de perfiles para llevar adelante lo que nosotros queremos”, aseguraron.

Rodríguez había ganado protagonismo público por ser la cara del gobierno provincial en la pelea que entabló con el sindicato de Obras Sanitarias. En la Casa Gris contaban que se encontraron una firma “hundida en la desidia” y un gremio “acostumbrado a cogobernar la empresa”. Para justificar su disruptiva intervención, en el directorio señalaban que la empresa era deficitaria y que la recaudación no alcanzaba a cubrir un décimo de los gastos. Apuntaban directamente al sindicato: sostenían que toda la planta sub-40 de empleados -más de cuatrocientos- respondían al gremio.

Pullaro quiere -para eso la empoderó- que Rodríguez encabece una avanzada similar en la Empresa Provincial de la Energía, una estructura mucho más grande que Aguas Santafesinas. Algo se intentó cuando se atacó el ingreso de familiares de empleados a la empresa. “No son títulos nobiliarios”, había dicho el gobierno en ese momento. Sin embargo, la avanzada quedó a medio camino y no generó la misma reacción en el sindicato de Luz y Fuerza, que es lo que realmente busca la Casa Gris: mostrarse enfrentado con el sector gremial, a tono con la época libertaria.

Agua potable, el nuevo desafío del PRO

Sin embargo, aunque lo más intenso ya haya pasado, no significa que haya que descuidar lo ganado. Por eso, el gobernador aceptó la sugerencia del ministro de Desarrollo Productivo Gustavo Puccini de nombrar al frente de ASSA a Renata Ghilotti. Es extraño: Puccini recomendó a una funcionaria que estaba en su ministerio para un cargo de otra dependencia. ¿Se la sacó de encima? “No, Gustavo estaba muy conforme con su gestión, pero entiende que es un perfil que robustece la gestión de empresas públicas. Es un desafío y un crecimiento para ella”, afirman cerca del ministro.

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Maximiliano Pullaro eligió el mismo perfil para las empresas públicas: mujeres, jóvenes y

Maximiliano Pullaro eligió el mismo perfil para las empresas públicas: mujeres, jóvenes y "que van al frente".

Hay, también, una coincidencia de perfiles entre Rodríguez y Ghilotti. Si bien no tienen el mismo bagaje técnico, la exconcejala rosarina cumple con las mismas características que la exdirectora del Ente Regulador de Servicios Sanitarios. Ambas son mujeres, ambas son jóvenes y ambas “van al frente”, destacan en la Casa Gris. Quienes hablaron con Ghilotti cuentan que está entusiasmada con su nuevo rol, al frente de una de las cajas más importantes del gobierno, y habiendo dejado la Secretaría de Transporte y Logística, donde se la vio algo corta de equipo.

Una experta a Transporte

Para completar el movimiento, quien obtuvo un ascenso fue Mónica Alvarado, que se venía desempeñando como segunda de Ghilotti en Transporte y Logística y ahora estará a cargo de dicha cartera. “No podíamos desconocer el trabajo que hizo con Renata, era lo que había que hacer”, se sinceró una fuente del gobierno.

Alvarado es una experta en el tema: fue la cabeza del Ente de Transporte de Rosario. De hecho, ahí se conoció con Ghilotti. “Se llevaban bien, fueron una buena dupla: Renata estudió temas como Hidrovía, aeropuertos y túnel subfluvial, mientras que Mónica le dio sustento en el área de transporte interurbano y de carga”, contó otra garganta al tanto del desempeño de ambas funcionarias en el último año.

No son pocos los desafíos que enfrentará Alvarado en su nuevo rol. Uno de ellos es lograr que Santa Fe tenga un rol preponderante en la Hidrovía Paraná-Paraguay, la vía navegable troncal que el gobierno de Javier Milei pretende privatizar. Otro es mediar en la guerra interna del Aeropuerto de Rosario, que enfrenta a los tres miembros del directorio y causó una intervención de un equipo del Ministerio de Economía en la gestión financiera de la estación aérea.

Silvio Barrionuevo, el sindicalista de Obras Sanitarias apuntado por Maximiliano Pullaro.
Silvio Barrionuevo está a cargo del sindicato de Obras Sanitarias, apuntado por el gobierno de Maximiliano Pullaro. 

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