En los principales despachos del Congreso celebraron este jueves el anuncio del viceministro del Interior, Lisandro Catalán, para saldar deudas con las provincias a cambio de bienes o empresas públicas. Los líderes libertarios consideran que, con medidas así, Javier Milei podrá lograr la sanción del proyecto de Presupuesto 2025 con respaldo de gobernadores de todas las fuerzas políticas.
Esa es la expectativa del oficialismo para la ley de leyes, cuyo debate legislativo quedó suspendido en Diputados, donde esta semana no hubo tratamiento en comisión ni está previsto que lo haya en la próxima. Se retomaría la siguiente y la hoja de ruta de La Libertad Avanza es abrir el recinto de la cámara baja el miércoles 20 de noviembre para aprobar el proyecto.
El itinerario al que aspiran en la Casa Rosada, según supo Letra P, se completa con una posterior y rápida sanción en el Senado, donde los debates requieren al menos siete días entre dictamen y recinto.
Con la enseñanza de la ley Bases, que tuvo correcciones en la cámara alta, el Gobierno negocia en paralelo en los dos rincones del Palacio. Otra diferencia con la rosca de verano es que hay intercambio de borradores con correcciones, pero los textos se mantienen bajo siete llaves. Uno de los documentos del Gobierno tiene decenas de partidas a reducir para habilitar el aumento de otras.
“Hay muchos cambios que se están trabajando para el dictamen, pero entendimos que una de las claves de esto es divulgar lo justo y necesario”, sostuvo ante Letra P uno de los negociadores de la UCR, uno de los bloques claves para que el Gobierno reúna la mayoría.
La negociación de Javier Milei
Esta semana, el secretario de Hacienda, Carlos Guberman; y el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, se instalaron en el Senado para reunirse con los bloques de la oposición dialoguista.
Hubo encuentros con la UCR y con Provincias Unidas, la nueva fuerza aliada. El resto de los partidos provinciales envió emisarios a los encuentros que se hicieron en la cámara de Diputados en los últimos 15 días.
La ilusión en la administración libertaria es que un acuerdo marco con la mayoría de los gobernadores garantice el respaldo de los bloques de la oposición en ambas cámaras. En ninguna bancada los mandatarios tienen mayoría de leales, pero pueden inclinar la cancha con presión política.
La negociación con los gobernadores todavía está en ciernes. Por caso, durante la reunión de funcionarios con la UCR del Senado, el capítulo jubilaciones quedó sin resolver. “De ninguna manera tenemos chances de aumentar el 8,1%”, aclaró Guberman, sobre el incremento vetado. La discusión quedó abierta.
Por si fuera poco, Rolandi y Guberman mantienen gestiones simultáneas con el PRO: este martes estuvieron con los diputados Cristian Ritondo, Daiana Molero y Luciano Laspina. Se comprometiera a incorporar el aumento de la coparticipación de la Ciudad como giro automático y no discrecional. Participó de la reunión el secretario de Hacienda porteño, Gustavo Arengo. Fue pocas horas antes de que Mauricio Macri participara de la reunión de la bancada.
Qué piden los gobernadores
Un pedido recurrente de las provincias es sumar el listado de obras públicas que tienen poco para concluir. No es fácil que sean complacidas sin romper el equilibrio fiscal, la regla de oro del Presupuesto libertario. Una contraoferta de la Rosada será que esas partidas nacionales estén condicionadas a un compromiso fiscal de las provincias.
Más lejos está de resolverse la asistencia a las 13 cajas previsionales provinciales. El Gobierno sostiene que muchos distritos recibieron fondos de más y condiciona los desembolsos a auditorías que se demora en realizar.
Uno de los planteos del dictamen alternativo de Encuentro Federal es exigirle a la Casa Rosada terminar las auditorías en febrero. Para cumplir, la ANSES debería sumar personal de refuerzo en el verano.
El acuerdo en cifras parece lejano: el Presupuesto 2025 establece que hay $254.421 millones para transferir a las cajas previsionales. El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, calcula que, sólo él, fue zdebería recibir una cifra similar. Resta una docena más.
Milei necesitará meter casi cartón lleno de los mandatarios para avanzar en el Presupuesto. En Diputados tuvo dos semanas difíciles: con el nacimiento del nuevo bloque radical, llamado Democracia Por Siempre; y la hostilidad manifiesta de la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, se gestó en la cámara baja una mayoría opositora que marca la agenda.
Se suman a ese lote anti Milei Unión por la Patria y Encuentro Federal, un bloque variopinto que actúa como oposición rasa. Los partidos provinciales se mantienen expectantes. En los próximos días, podría empezar a reunirse la decena de mandatarios con origen en partidos del extinguido Juntos por el Cambio, para hacerse fuertes en la negociación.
Algunos tienen representantes en EF como Ignacio Torres (Chubut) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos). En el bloque coordinado por Miguel Pichetto más pesa la presencia de Llaryora y su antecesor Juan Schiaretti. Como explicó Letra P, un equipo de esta bancada liderado por Nicolás Massot, diseñó una propuesta de ajustes para conseguir fondos que permitan aumentar jubilaciones y mejorar el presupuesto de universidades.
El ajuste de Pichetto y Massot
La propuesta de EF incluye recortes en áreas sensibles como la SIDE, la Secretaría General de la Presidencia y los subsidios fiscales a los grandes unicornios, como Mercado Libre. Contempla un aumento de partidas para jubilaciones y universidades, que Milei ya aceptó que tiene mejorar. Está buscando alternativas, como los fondos de los partidos políticos. No es la única.
Para que no prosperen las propuestas de Massot , el Gobierno deberá acercar una alternativa mejor a los gobernadores y ese es el desafío de Rolandi y Guberman. Martín Menem ya se contactó con Pichetto para anticipar que abordarán a los mandatarios para que escuchen otras ofertas.
El rionegrino le explicó que si hay un pronunciamiento público de los jefes territoriales a favor de alguna versión del Presupuesto, el panorama podría allanarse. Todavía no ocurrió.
Hace 15 días, Milei recibió a cuatro mandatarios que pueden colaborar con votos como Osvaldo Jaldo (Tucumán), Hugo Passalacqua (Misiones), Raúl Jalil (Catamarca) y Gustavo Sáenz (Salta). El primero es oficialista confeso y el resto, con lo mínimo, ayudó a sostener el veto a la ley de presupuesto universitario. Ninguno se quedó conforme con las respuestas del Presidente. La negociación debe continuar.