El gobernador desdobló las elecciones y quiere fortalecer su representación en la Legisaltura y el Congreso. El desembarco libertario y la interna del PJ.
Leandro Zdero, gobernador de Chaco.
Chaco es una de las provincias que votará representantes para las tres bancas en el Senado en las elecciones legislativas 2025. También se pondrán en juego cuatro espacios en Diputados y, con elecciones desdobladas, la mitad del legislativo provincial. Leandro Zdero se juega buena parte de su gobernabilidad entre su enfrentamiento con el PJ y su cercanía con La Libertad Avanza (LLA).
Esta nota forma parte de una producción especial de Letra P pensada para confeccionar el mapa federal de los comicios de medio término, bajo la premisa de que cada provincia es un mundo y de que en cada distrito el tablero político cobra una fisonomía particular que desarma el esquema de fuerzas de la política nacional.
Zdero forma parte del lote de gobernadores radicales dispuestos a acercar posiciones con la Casa Rosada. El año pasado, logró vencer la hegemonía política del peronismo y ahora debe reafirmar ese poderío tanto en la provincia como en el Congreso, donde la complejidad del armado chaqueño se expresa con una banca virtualmente perdida en la cámara alta.
Sucede que Víctor Zimmerman fue convocado por el mandatario para asumir como ministro de Producción y, sobre el final del año, abrió un conflicto por su sucesión. Alicia Terada, íntima amiga de Elisa Carrió, es la referente que sigue en la lista que Juntos por el Cambio (JxC) presentó en 2019, pero tanto Zdero como el sector libertario quieren que esa banca quede para Ayrton Ulrich. Detrás del argumento apoyado en la ley de paridad se esconde la sensación de que el gobernador podría perder influencia sobre la banca y La Libertad Avanza, un voto aliado clave.
Zimmerman pidió licencia hasta febrero y logró patear el conflicto, aunque la provincia quedó con un voto menos en la cámara alta. Su banca será una de las que se renueve este año. Dependiendo de la suerte de la gestión y la estrategia del gobernador, podría aspirar a repetir.
En la división del radicalismo en el Congreso, Juan Carlos Polini, que enfrentó a Zdero en la interna de 2023, quedó del lado de los dirigentes que ponen el acento en su distancia con Javier Milei. Es el único escaño de la UCR que se renovará en la cámara baja y, más allá de su pertenencia a Democracia para siempre, sostiene un buen vínculo con Zdero.
De la estructura que en la provincia se denomina Chaco Cambia se desprende la banca de la empresaria Marilú Quiróz, la representante del PRO que también podría aspirar a continuar en su cargo.
Toda la estrategia, claro está, podría recalcularse a partir de una posible alianza que dependerá, como ya lo expresó el propio Presidente, de un acuerdo macro a nivel nacional.
Después de colar un diputado nacional sin pegar ni un afiche en la provincia, el mileísmo logró ordenarse en Chaco como parte del trabajo nacional que encabezaron Karina Milei y Martín Menem.
Alfredo "Capi" Rodríguez, un candidato que el Presidente no reconoció como propio en 2023, es la cabeza de un armado que analiza si desembarca con una lista propia en la Legislatura y espera indicaciones para activar las acciones que desembocarán en el armado de la listas para el Congreso.
A su favor, el ordenamiento permitió también zanjar las diferencias que, al menos temporalmente, despejan los fantasmas de ruptura que sobrevuelan en otros distritos. Además del diputado Carlos García, otros de los referentes destacados en la provincia son el titular del PAMI en Chaco, Alfredo Moreno; el jefe de la Secretaría de Empleo en la provincia, Octavio Graciosi; el responsable de la Udai del Anses de Villa Ángela, David Serfaty; y Fredy Sotelo, el jefe de prensa local que opera como virtual vocero del partido.
Como pasa en las provincias en las que la elección demanda muchos casilleros que rellenar, el desafío de los libertarios chaqueños también implica encontrar una estrategia para armar listas competitivas en cada una de las disputas en juego. Eventualmente, mostrar esa capacidad servirá también para negociar espacios en un eventual armado de alianza.
Como contó Letra P, está prácticamente confirmado que las elecciones 2025 representarán la vuelta al ruedo de Jorge Capitanich luego de la derrota de 2023. Está prácticamente confirmado que encabezará la lista al Senado, aunque como conductor del PJ provincial deberá sortear las internas que ya le jugaron en contra en la elección de 2023.
Las bancas que el peronismo pone en juego son las de María Inés Pilatti Vergara, que no puede aspirar a otro mandato, y la de Antonio José Rodas, que ingresó en 2019 luego de que Capitanich renunciara para asumir como gobernador. En Diputados, el peronismo también se juega dos bancas: la de la exintendenta de Charata, María Luisa Chomiak, y la de Juan Manuel Pedrini, que no puede volver a presentarse.
Con sus opositores internos (entre los que se destacan el jefe de la CER, Gustavo Martínez; el exgobernador Domingo Peppo y exdiputado José Mongeló) reclamando espacios para la renovación de las referencias, Capitanich buscará unificar criterios para un armado de listas en el que también se pueden colar nombres que busquen posicionarse de cara a 2027.
Para eso, también resulta relevante la forma en que el PJ logra armar la lista para pelear por las bancas que pone en juego en la Legislatura, que en los papeles expresa la división del espacio que llegó al recinto desde la boleta del Frente de Todos en 2021. En concreto, pone en juego ocho bancas, mientras el oficialismo debe renovar siete. La apuesta, en ese sentido es evitar una derrota que le permita a Zdero dar vuelta el tablero para lograr gobernar con una mayoría en la cámara; algo que, pese a la interna, el justicialismo ha logrado a lo largo de 2024.
El referente del espacio que a nivel nacional comandan Juan Schiaretti y Florencio Randazzo es Eduardo Aguilar. Se trata de un referente dentro del peronismo provincial que se hizo cargo del Ministerio de Economía provincial durante la primera gestión de Capitanich. Asumió como diputado provincial en 2011 y dos años más tarde abandonó la banca para convertirse en senador.
Se fue del PJ en 2017 y armó su propio espacio, que, desde entonces, siempre comulgó con las expresiones alternativas a la polarización. En 2019 se encolumnó detrás de la candidatura presidencial de Roberto Lavagna y el año pasado se sumó a Hacemos por Nuestro País.
Mirando la elección provincial más que la contienda nacional, la izquierda en Chaco buscará sumar apoyos polarizando con un modelo que identifican como una alianza entre Zdero y Milei. Aprovechar la diáspora del peronismo también aparece como una posibilidad para un espacio que en 2023 apenas cosechó unos cinco mil votos.