La sucesión del gobernador se lleva toda la atención en la provincia. Además, cambia la Legislatura, se juegan las tres bancas del Senado y tres en Diputados.
Gerardo Zamora junto a Claudia Ledesma Abdala. El gobernador culminará su cuarto mandato no consecutivo en Santiago del Estero.
Santiago del Estero pondrá en juego tres bancas de Diputados y tres en el Senado en las elecciones nacionales 2025. La contienda se desarrollará a la sombra de los comicios provinciales que definirán quién sucederá a Gerardo Zamora y renovarán toda la Legislatura. La novedad que puede mover el amperímetro es la irrupción local de La Libertad Avanza.
Esta nota forma parte de una producción especial de Letra P pensada para confeccionar el mapa federal de los comicios de medio término, bajo la premisa de que cada provincia es un mundo y de que en cada distrito el tablero político cobra una fisonomía particular que desarma el esquema de fuerzas de la política nacional.
En su primera aparición pública como jefa del Partido Justicialista, Cristina Fernández de Kirchner viajó a Santiago del Estero y eligió a Zamora como ejemplo a seguir. Habló centralmente de la gestión santiagueña, pero también del armado político del Frente Cívico que la sostiene y que está conformada por una alianza histórica entre la rama del radicalismo kirchnerista del gobernador y del peronismo provincial al que, desde 2013, le toca poner el vice.
Esa situación le permite a Zamora gozar de un poderío único en el país: culminará su cuarto mandato, alternado en el medio por un interregno a cargo de su esposa, la senadora Claudia Ledesma Abdala, manejando todas las bancas que representan a la provincia en el Congreso.
En los pasillos políticos de la provincia, la posibilidad de un nuevo enroque que ponga a Zamora en el Senado es algo que suena cada vez con mayor potencia. Aunque de todas formas imaginan que, fiel a su estilo, el gobernador se guardará la carta de la convocatoria a elecciones y el nombre del aspirante a sucederlo hasta último momento.
El nombre, confían, quedará en manos del gobernador y el senador José Emilio Neder, titular del PJ santiagueño. “Es un acuerdo inquebrantable que lleva más de 20 años, ellos van a comunicar quienes serán los que integren la fórmula que representará al proyecto”, aseguran.
Neder podría integrar la boleta en 2025. No es el caso de Gerardo Antenor Montenegro, el otro peronista en el Senado que viene de una larga trayectoria legislativa que empezó como concejal del capital, siguió en la Legislatura y llegó a la cámara alta en 2013.
En el oficialismo reconocen que la pelea con Zamora es una de las más complicadas que enfrentarán en 2025. No sólo porque se eligen prácticamente todos los cargos representativos, sino por la hegemonía que expresa el Frente Cívico luego de 20 años en el gobierno.
Sin embargo, en el flamante partido del Presidente aseguran que tienen “un proyecto de poder” y avanzan en recorridas que apuntan a seducir al voto “enojado” con “el caudillismo” que, entienden, expresa Zamora y estiman por encima del 40% del electorado.
El referente libertario que aparece en las conversaciones políticas en Santiago del Estero es Tomás Figueroa, el presidente del partido que acompañó a Martín Menemcomo secretario parlamentario de la Cámara de Diputados y volvió a su provincia para armar el partido y trazar la estrategia electoral.
Ante una elección múltiple, aparecen otros nombres, como la apoderada legal del partido y jefa de la Agencia Territorial de Trabajo, Laura Godoy; y también Italo Cioccolani, que encabezó la lista que, colgada de la boleta de Milei, había sacado el 27% de los votos en las PASO, pero tras una jugada legal atribuida a Zamora, no pudo participar de las generales de octubre.
Hasta el nombre del Gordo Dan, el soldado digital libertario también conocido como Daniel Parisini, nacido en la provincia, apareció en el lote de posibles postulantes. Aunque entre los armadores reconocen el rumor, aseguran que no hubo contactos formales, como tampoco expresiones del propio Parisini que permitan proyectar una posible participación en las listas de 2025.
Los movimientos en el flamante espacio libertario son seguidos de cerca por quienes integran la oposición histórica al zamorismo. Por estas horas, analizan los pasos a seguir con el objetivo de ampliar un armado con posibilidades concretas de disputarle poder al Frente Cívico.
En esa dirección, reconocen las conversaciones con las tribus libertarias y se enfocan en el debate en torno a proyectos concretos dejando, al menos por el momento, los nombres a un costado.
Sin embargo, en la mesa de discusión que determinará la estrategia aparecen figuras conocidas, como el diputado provincial Gabriel Santillán y el concejal capitalino Facundo Pérez Carletti, por el lado del PRO, y Natalia Neme y el presidente del bloque radical en la Legislatura, Gerardo Floridia, por el lado de la UCR.
En el naciente armado de Hacemos, la experiencia de centro con la que Juan Schiaretti intentará cosechar la siembra de 2023, no tiene todavía nombres fuertes en el escenario santiagueño.
Como en todo el país, trabaja a la par de sus socios políticos para sumar las voluntades, entre los que ya se habían sumado en la aventura presidencial de Hacemos por Nuestro País. Santiago del Estero, puntualmente, es uno de los territorios con despliegue del Partido Autonomista.
Para la sociedad santiagueña Schiaretti no es un apellido desconocido. El tres veces gobernador de Córdoba fue, entre 1993 y 1995, el interventor federal que Carlos Menem designó al frente del provincia luego del Santiagueñazo que terminó con el gobierno de Fernando Lobo y desembocó en el último regreso al poder de Carlos Juárez.
Como al resto de las expresiones opositoras, a la izquierda en Santiago le cuesta encontrar una síntesis y sus expresiones suelen fraccionarse ante cada desafío electoral. De todos modos, el espacio más representativo es, como a nivel nacional, el Frente de Izquierda y los Trabajadores que en 2021, con una fórmula que integraron Maximiliano Díaz Alomo y María Isabel Olivera cosechó el 1,3% de los votos.