Después de su discurso ante la asamblea legislativa, este sábado en el Congreso, Javier Milei encabezará una cena en la Casa Rosada junto a las primeras líneas de su gabinete y el presidente de la Cámara de Diputados Martín Menem. Será un encuentro reservado, al que no será invitada la vicepresidenta Victoria Villarruel, con quien el mandatario se reencontrará en público luego de cinco meses.
“No tiene ningún tipo de injerencia en la toma de decisiones. No participa de las reuniones de Gabinete. El diálogo es lo que se necesita institucionalmente para cumplir con nuestros roles", calificó la relación entre ambos Milei. Por esto, no resultará llamativa la ausencia de Villarruel al ágape en el que se espera, según fuentes oficiales, que el jefe de Estado comience a darle volumen a su idea de relanzar el Gobierno con una fuerte impronta política y de gestión.
Lo novedoso es la utilización de la Casa Rosada para la cena, siendo que es más habitual que este tipo de encuentros el Presidente los realice en la quinta de Olivos, donde suele recibir también a economistas y hasta a periodistas.
Las sillas para cenar en la Casa Rosada
Para este sábado sólo habrá 12 lugares reservados en el Salón Eva Perón del primer piso de Balcarce 50. Uno para la secretaria general Karina Milei, otro para el jefe Gabinete Guillermo Francos y el correspondiente para los ocho titulares de ministerios: Toto Caputo (Economía), Patricia Bullrich (Seguridad), Sandra Pettovello (Capital Humano), Mario Lugones (Salud), Gerardo Werthein (Relaciones Exteriores), Luis Petri (Defensa), Mariano Cúneo Libarona (Justicia) y Federico Sturzenegger (Desregulación).
También tendrán su silla reservada el vocero presidencial Manuel Adorni, y el titular de la cámara baja, que también oficia de mano derecha de El Jefe en el armado territorial y jurídico de La La Libertad Avanza (LLA) en todo el país.
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Javier Milei, junto a sus principales funcionarios.
Javier Milei y Victoria Villarruel, cinco meses sin verse
Para la cúpula presidencial, el vínculo político entre Milei y Villarruel está completamente roto y es irreparable, a tal punto que la vice fue expulsada de todas las mesas de decisión política y electoral: ella no es parte de la orgánica de La Libertad Avanza, no asiste hace meses a las reuniones de gabinete en Casa Rosada y tampoco participa de la toma de decisiones de gestión, por lo que su lugar está circunscrito sólo a su rol como presidenta del Senado.
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Esta distancia explica por qué los únicos momentos en que el binomio presidencia se mostró en una misma fotografía en los últimos tiempos fue a instancias de distintas jornadas institucionales como la que habrá este sábado. De hecho, la última vez que el jefe de Estado y su excompañera de fórmula se vieron las caras fue el 15 de septiembre del 2024, cuando Milei asistió al Congreso para presentar el Presupuesto 2025.
Aquella noche, en la que el discurso del Presidente también fue transmitido por cadena nacional, Milei y Villarruel sólo cruzaron un abrazo y unas breves palabras de rigor para las cámaras. Aún más frío fue el saludo de Karina Milei y la vicepresidenta. Meses antes, en marzo, Villarruel fue consultada en una entrevista de TV sobre su relación con la hermana menor del jefe de Estado y había afirmado que ambas "son bravas" y que Milei sólo era un "pobre jamoncito" que estaba en el medio.