El educador superó en primera vuelta al economista Darío Epstein. Renovación y llamado a la unidad. Rechazó el planteo del papa sobre “genocidio” en Gaza.
Mauro Berenstein, presidente de la DAIA
DAIAEl educador Mauro Berenstein logró este martes 85 de 165 votos emitidos en las elecciones de la entidad política de la comunidad judía y derrotó a Darío Epstein, el economista cercano a Javier Milei. Con el 51,52% de los sufragios en la primera vuelta, el dirigente presidirá la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) en el trienio 2024-2027.
Berenstein será acompañado en las tres vicepresidencias por Gabriel Salem, Marina Degtiar y Katy Geler. La Comisión Directiva se completa con Mónica Sucari, secretaria general; Ricardo Furman, tesorero; y Susana Gelber, secretaria de Actas.
“Somos una sola comunidad y tenemos que trabajar entre todos. Les pido un compromiso común, que es alinearnos en una sola cosa que es la comunidad judía en Argentina”, dijo tras ser proclamado para suceder a Jorge Knoblovits en la DAIA.
Berenstein, de 45 años, proviene del ámbito educativo. Su carrera incluye la presidencia en la escuela Bialik del barrio porteño de Villa Devoto. También estuvo al frente de la Federación de Escuelas Judías Argentinas (FEJA), cargo al que renunció para involucrarse en esta campaña.
“No creo en mesianismos ni en conducciones unipersonales, por eso convocamos a gente de bien, identificados con el ideal de la DAIA, con probada trayectoria”, planteó en su último discurso preelectoral.
“Nuestro norte será trabajar en la seguridad con el objetivo de cuidar a la comunidad judía, el compromiso desde nuestra misión para que no existan posturas extremas antisemitas históricos ni los de turno. Lográndolo por medio de la educación y siendo firmes con acciones legales cuando así lo requiera”, sostuvo.
En la previa a las elecciones en la DAIA, Berenstein expresó su rechazó al pedido del papa Francisco de evaluar "con atención" la situación en la Franja de Gaza para determinar si encuadra en la definición técnica de “genocidio” que sostienen juristas y organismos internacionales.
“El derecho de Israel a la autodefensa no es genocidio”, le respondió el dirigente judío y profundizó: “Esta afirmación no sólo es inexacta e injusta, sino que también ignora la realidad del conflicto y el derecho fundamental de Israel a proteger a sus ciudadanos”.
“Calificar la respuesta de Israel como genocidio es una distorsión de la verdad y una ofensa a la memoria de las víctimas del terrorismo. Israel actúa de manera precisa y proporcionada para neutralizar las amenazas, mientras que los grupos terroristas atacan deliberadamente a civiles inocentes”, sostuvo.
Berenstein instó al Vaticano a “reconsiderar su postura y a trabajar por una solución justa y duradera al conflicto que garantice la seguridad de Israel y la paz en la región”.